El tráfico aéreo de varias comunidades autónomas -entre ellas Cataluña, Castilla y León, Aragón y La Rioja- ha quedado restringido esta mañana ante el riesgo de la caída de un cohete chino fuera de control. Un riesgo que también afecta a la provincia de Castellón y por lo que ENAIRE, el gestor de navegación aérea de España, ha restringido el tráfico aéreo hasta las 10:18 horas. Este suceso ha provocado el retraso del vuelo con destinación a Londres-Luton, que estaba previsto que despegara a las 9:40 horas y, finalmente, lo ha hecho casi 1 hora más tarde, a las 10:35 horas. Según ha podido saber la Cadena SER, los controladores aéreos están pendientes por si hubiera que desviar algún vuelo. China ha dejado caer sin control parte de un cohete de su programa espacial, el Larga Marcha-5B Y4. El módulo pesa 20 toneladas, aunque la fricción contra la atmósfera suele desintegrar buena parte de esta chatarra espacial en su vuelta a la Tierra. España está en la trayectoria y a esta hora los distintos organismos están estudiando si es necesario adoptar más medidas. El tráfico aéreo en Castilla y León, Aragón y La Rioja ha quedado también restringido, según fuentes de Protección Civil. En Cataluña el tráfico se ha cerrado durante las 9:38 y las 10:18 horas. El riesgo de que caigan de chatarra espacial sobre el espacio aéreo ha obligado, por precaución, a paralizar la actividad en distintos aeropuertos españoles. Castellón, Barcelona, Tarragona, Ibiza y Reus han dejado de operar, según ha informado Protección Civil. En este momento, las miradas están puestas en la trayectoria de parte del cohete. El Ejército del Aire y del Espacio está realizando el seguimiento de los restos del lanzador chino CZ-5B. Está previsto que la última órbita antes de la reentrada en atmósfera atraviese la península entre las 9:50 y 10:05 hora local. Este jueves el módulo Mengtian de la estación espacial china completó su transposición. El Mengtian, junto con el módulo central Tianhe y el Wentian, el otro laboratorio, forman ya unidos la estación espacial Tiangong, con una forma de letra T tras el acople realizado en esta última misión. El nuevo módulo, con una longitud de 17,8 metros y un diámetro de 4,2 metros, pesaba alrededor de 23,3 toneladas en el momento del lanzamiento. Será un área exclusivamente de trabajo y actividad deportiva para los astronautas, al contrario que los otros dos módulos, que cuentan con baños y dormitorios. La estación espacial china, cuyo nombre significa «Palacio celestial» en mandarín, pesará unas 70 toneladas y se espera que funcione durante unos 15 años orbitando a unos 400 kilómetros de la superficie terrestre. En 2024, es probable que se convierta en la única estación espacial del mundo si la Estación Espacial Internacional, una iniciativa encabezada por Estados Unidos y a la que China tiene vetado el acceso por los lazos militares de su programa espacial, se retira ese año tal y como está previsto. En los últimos años, el programa espacial chino ha conseguido éxitos como alunizar la sonda Change 4 en la cara oculta de la Luna -primera vez que se logra- y llegar por primera vez a Marte, convirtiéndose en el tercer país -tras Estados Unidos y la extinta Unión Soviética- en amartizar.