Alicante

Después de que el bipartito iniciara ayer con el PSOE la ronda de contactos con el resto de grupos municipales para lograr el apoyo a los presupuestos de 2023, hoy ha sido el turno de Compromís y Unidas Podemos.

Fuentes consultadas ven lejos un posible acuerdo con el equipo de gobierno ya que el borrador de las cuentas que se les ha mostrado deja "muchas dudas" por la falta de ambición a la hora de hacer frente a la inflación y ayudar a los más vulnerables. Además, lamentan que, con la excusa de que todavía está siendo fiscalizado por Intervención, no se les facilita una copia del borrador para su estudio en profundidad.

Desde Compromís creen que se trata de unos presupuestos de trámite que poco o nada ayudarán a la transformación verde de la ciudad, a paliar las consecuencias de los altos costes energéticos o a la creación de empleo y la reactivación económica.

Su portavoz, Natxo Bellido, lamenta que "las inversiones son prácticamente las mismas de años anteriores", echa en falta ayudas sociales para los más vulnerables y critica los importantes recortes que sufren áreas como patrimonio, igualdad o cooperación. Por ello, concluye, mucho tienen que cambiar las cuentas de aquí a la próxima semana, cuando se volverán a reunir, para poder dar su apoyo.

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Desde Unides Podem afirman que la reunión de esta mañana ha sido un intento de justificación de los recortes en las principales partidas destinadas a políticas sociales, igualdad, cooperación, medio ambiente y empleo.

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Una situación inaceptable para Xavier López, portavoz de la coalición de Unides Podem-EU, que ha señalado que "tras la pandemia y en un momento de crisis derivada de la inflación, el ayuntamiento no puede dejar a la ciudadanía sin las políticas públicas más necesarias para el día a día de la gente de Alicante".

Barcala no opina de opiniones

Por su parte, el alcalde Barcala, cuestionado por las críticas a las cuentas y por los posibles recortes en áreas como Cooperación o Igualdad para, apuntan desde la izquierda, contentar a Vox, critica que se trata de excusas para no apoyar las cuentas por cuestiones políticas, no por el contenido de las mismas.