Benidorm lidera el turismo de la Comunitat Valenciana
La ciudad cierra el año 2022 con una ocupación media de más del 76%, aunque todavía se deja 8 puntos respecto a 2019
Benidorm
Benidorm ha vuelto a ser el destino valenciano con un mejor comportamiento turístico durante el recién terminado año 2022. Así, al menos, se desprende del dato adelantado de ocupación hotelera hecho público por la patronal hotelera Hosbec este martes y que sitúa la media de la ciudad en un 76,3% a lo largo de los últimos doce meses. Esa cifra, que sirve a la capital turística para liderar a la Comunitat, también supone que sea el destino que más terreno se ha dejado, casi un 8%, respecto a 2019, el último año previo a la pandemia y, por lo tanto, de normalidad.
Esa caída se ha sustanciado principalmente en la temporada baja, algo que tiene una explicación lógica ya que es ese periodo cuando la planta hotelera de la ciudad, compuesta de más de 42.000 camas, hubo de volver a cerrar en un alto número debido a los efectos de la sexta ola de la pandemia, que volvió a levantar muchas restricciones a principios del pasado año.
De hecho, se subraya desde Hosbec, si se eliminasen esos meses en los que la variante Ómicron volvió a poner en jaque al turismo de la valoración anual, la ocupación media de Benidorm crece hasta el 81,5%, un dato ya mucho más cercano al 84,2% registrado en un 2019 que, cabe recordarlo, fue histórico con las mejores cifras de toda la serie.
Así las cosas, y ya en el terreno de lo concreto, el primer trimestre del año dejó un paupérrimo 46% de ocupación hotelera en una ciudad acostumbrada a guarismos, incluso en esa temida temporada baja, muchísimo más altos. El punto de inflexión, según este informe adelantado de Hosbec, llegó con la Semana Santa, momento en el que las camas ocupadas se catapultaron y siguieron creciendo hasta agosto, cuando se rozó el lleno técnico con más del 90% de las plazas reservadas.
En este sentido, el presidente de Hosbec, Fede Fuster, ha realizado su primera valoración de estos datos afirmando que «la recuperación turística es todavía una asignatura pendiente». En su opinión, «la inflación, la subida de los tipos de interés y la crisis energética no ayudarán nada en 2023 por lo que tenemos muchas dudas de cómo se va a comportar la actividad en el próximo año».
Fuster, además, ha advertido que el recién estrenado 2023 «no va a ser nada fácil» porque «hay cuestiones que no nos ayudarán como la tasa turística, pero vamos a luchar por conseguir este objetivo intentando que todas las administraciones sean conscientes de la importancia estratégica del turismo para la economía y sociedad tanto valenciana como española».