Ribó apuesta por derribar el hotel Sidi Saler y convertir el terreno en cordón dunar

València

El Ayuntamiento de València ha denegado a los propietarios del hotel Sidi Saler las licencias de obra y ambiental que habían solicitado para reformar el edificio y poder retomar la actividad. La decisión se ha comunicado también a la demarcación de Costas como primer paso antes de solicitar que sea derribado para renaturalizar ese espacio como parte del cordón dunar.

La concejala de Actividades, Lucía Beamud, explica que se han denegado las licencias porque en el Sidi Saler, al ser un edificio fuera de ordenación sustantivo, según el Plan General, solo se pueden permitir obras menores de mantenimiento para conservar la actividad. Pero lo que se pedía era una reforma profunda para reabrir un hotel que lleva más de una década cerrado.

La resolución ha sido comunicada a Costas porque el edificio se encuentra dentro del dominio público marítimo-terrestre. Beamud no esconde que el deseo del Ayuntamiento es que el hotel sea derribado y que ese terreno se transforme en un cordón dunar, como medida de protección frente a la regresión de las playas, que puede ir a más en los próximos años por la emergencia climática o por la futura ampliación norte del puerto de València.

Ribó: "El edificio debe desaparecer"

Una decisión que cuenta con el respaldo del alcalde Joan Ribó que cree que ese edificio debería desaparecer.

Ribó recuerda que en los últimos años del franquismo los movimientos vecinales consiguieron salvar La Albufera. Las protestas de grupos ecologistas también hicieron que se quitara el paseo marítimo que allí se construyó. Cree que el Sidi Saler debe llevar el mismo camino.

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La oposición pide que se convierta en centro para mayores

Pero el Partido Popular considera que antes de ser demolido ese edificio podría destinarse a otros usos, como convertirse en una residencia de mayores, tal y como reclaman los vecinos.

Por eso, antes de tomar decisiones irreversibles, el concejal del PP, Juan Giner, pide al gobierno local que se siente a hablar con los vecinos y los propietarios del Sidi Saler para buscar la mejor solución desde el punto medioambiental, económico y social.

Y para el portavoz de Ciudadanos, Fernando Giner, el gobierno local quiere demoler el edificio a toda costa por un simple capricho ideológico.

Giner vuelve a pedir que el edificio se dedique a una residencia para personas mayores, para paliar la falta de plazas en la ciudad.