Quienes tengan dudas de ser bebés robados o dados en adopción pueden aportar su ADN al banco genético creado por Fisabio

València

La Generalitat Valenciana es pionera en la identificación de cuatro bebés robados nacidos durante el franquismo. Se trata de dos parejas de hermanos -dos hermanas separadas de sus padres y también un hermano y una hermana- que han podido encontrar sus raíces gracias al banco genético creado por la Fundación Fisabio, a instancias de las asociaciones de víctimas y de la Conselleria de Participación y Memoria Democrática.

Las cuatro personas verificadas como bebés robados son fruto del análisis de 134 muestras biológicas recogidas por el Servicio de Secuenciación de la Fundación Fisabio, dependiente de la Conselleria de Sanitat Universal i Salut Pública: 91 procedentes de familiares que sospechaban que podrían haberles robado a sus hijos y 43 de posibles casos que sospechaban que fueron separados de sus madres al nacer. Muestras que partieron de un listado de 231, pero el desfase de los datos y la desconfianza de los afectados a la hora de facilitarlos a los investigadores hizo imposible que se pudieran llegar a analizar en su totalidad.

Entre ellos, destaca el de dos hermanas que no se conocían entre sí. Una de las víctimas es Inma Higón, que ha logrado encontrar a su hermana: "Es un sentimiento parecido a cuando abrazas a tu hijo y sientes esa conexión", explica respecto a cómo encajó el hecho de descubrir, a sus 50 años, que no era hija única.

No se conocen, pero son hermanas: confirmado el parentesco de cuatro bebés robados durante el franquismo en la Comunitat Valenciana

Un banco de ADN estatal

Para avanzar en la identificación de bebés robados, la consellera de Memoria Democrática, Rosa Pérez Garijo, ha aprovechado los micrófonos de Hoy por Hoy Locos por Valencia para defender la necesidad de crear un banco de ADN estatal, algo que ya ha trasladado a representantes del Ejecutivo, puesto que ninguna otra autonomía goza de un sistema similar y en muchos casos resulta complicado detectarlos porque los afectados han podido cambiar de comunidad a lo largo de su vida. Un banco que, según afirma, debería construirse a imagen y semejanza del que se hizo en Argentina, y que ha dado "excelentes resultados".

Además, Pérez Garijo ha puesto el foco en el trabajo conjunto de las administraciones y las asociaciones que buscan niños robados para avanzar en "calidad democrática": "Somos pioneros en el Estado español porque son las primeras identificaciones que se hacen desde un banco de identificación genética pública", ha reivindicado.

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En este sentido, hace un llamamiento público a todas aquellas personas que tengan "dudas o certezas" de ser robadas: "Si pudiéramos hacer esas pruebas genéticas de una forma masiva, los resultados serían mayores e iríamos avanzando".

Así se analiza el ADN para esclarecer los parentescos

Llúcia Martínez, investigadora principal del proyecto, explica que el método correcto para contactar con este banco de ADN es acudir a las distintas asociaciones para facilitar toda la información -tanto genética como personal- necesaria, que posteriormente llegará hasta la Fundación Fisabio.

El proceso es el siguiente: se recoge una muestra de ADN mediante un hisopo y se analiza un gran número de "regiones polimórficas", que pueden ayudar a afirmar con precisión que existe una relación familiar.

En caso de que se encuentren coincidencias, se analiza el ADN mitocondrial, lo que permite añadir "un valor suplementario" para confirmar que se trata de dos hermanos.

"Para hablar de robo, hay que encontrar a la madre biológica"

Enrique Vila, abogado especializado en búsqueda y reencuentro de familiares, describe la importancia de contar con el relato de la madre biológica, que es el único que puede esclarecer si estamos ante un caso de bebés robados o si realmente esa persona fue dada en adopción.

"Hasta que no encontremos a la madre biológica, no lo podemos saber. Y hay que ser muy estrictos a la hora de sentenciar los casos. Para hablar de robo tenemos que conocer esa versión", explica.