Los inicios de Nino Bravo: Los Hispánicos y Los Superson
Segundo capítulo del podcast "Querido Nino"
València
Nino Bravo nació en Aielo de Malferit un 3 de agosto de 1944 con el nombre de Luis Manuel Ferri Llopis, y, como el célebre refresco -que dice la leyenda se inventó en Aielo-, pudo haber conquistado el mundo. De hecho, lo hizo en el mundo hispano y se disponía a hacerlo en el resto del planeta cuando un accidente de coche truncó una carrera que estaba resultando meteórica.
Consuelo, primero y Luis Manuel, más tarde, llegaron a este mundo en la casa de su abuela. Y allí pasaron sus dos primeros años de vida. Los siguientes fueron en Carcaixent, localidad natal de su madre, Consuelo, y que estaba muy cerca de la correduría de seguros de La Pobla LLarga, donde su padre, conocido por todos como el señor Manolo, trabajaba. Finalmente, cuando nuestro protagonista, el jovencito Luis Manuel Ferri, tenía ocho años de edad, se asentaron definitivamente en València, en la vivienda familiar, en el número 31 de la calle Visitación, en pleno barrio de Sagunto.
Capítulo 2 | El largo y duro camino
Capítulo 2 | El largo y duro camino
Luis Manuel Ferri estudió en el Instituto Lluís Vives, en el centro de València, frente a la estación del Norte. Sacó una nota media de sobresaliente. Sin embargo, decidió cambiarse a una academia del barrio para después buscar su primer trabajo, nada menos que como aprendiz de joyero.
Luis Manuel antes de Nino Bravo
Durante esos años de infancia y primera adolescencia, el joven Luis Manuel estaba fascinado por la música que oía en la radio. Manolito soñaba con ser cantante, pero no se lo dijo a nadie, lo mantuvo en secreto hasta un día, allá por el año 1959, en que escuchó en la radio una canción de Domenico Modugno. En ese contexto, en los inicios de los 60, se creó el escenario propicio para que Manolito, el futuro Nino Bravo, iniciara su primer asalto al ansiado éxito. Estaban a punto de nacer Los Hispánicos, que en sus inicios apostaron por temas melódicos, versiones de éxitos de la época como como “Moliendo Café”, u “Only You” de los Platters.
Dos años después, el mismo escenario que los vio nacer, el de la Sociedad Coral El Micalet, fue el que despidió a Los Hispánicos, y puso punto y final al primer intento de Luis Manuel para triunfar en la música. Sus compañeros no estaban decididos a apostar por la música, y se lo dijeron a Luis Manuel. Pero solo tenía 19 años, y aún mantenía intacta la ilusión.
En 1964 Luis Manuel Ferri entró en los Superson para sustituir a su cantante original, Carlos Lardíes. De esta manera quedaron conformados los primeros Superson, con Manolo a la voz, Saturnino Laredo y Josep Bosch en las guitarras, Vicente López al bajo, y Salvador Pelejero a la batería. El grupo ya gozaba de buena reputación por la zona de València, pero que iba a ser mucho más grande con la llegada de Luis Manuel Ferri. Tal es así, que pronto recibieron una propuesta de gran calado: un contrato de seis meses para actuar en Benidorm, para el que Pepe y Vicente Juesas entraron en el grupo sustituyendo a Saturnino Laredo y Josep Bosch.
A los dos años, Nino fue llamado a filas, en la marina, en Cartagena. Al joven Luis Manuel, la mili se le hizo muy dura, especialmente desde el punto de vista psicológico. Se desanimó y estuvo a punto de abandonar la música. Afortunadamente, sus amigos le convencieron, y a su regreso a València, un Luis Manuel aún dubitativo se reincorporó a Los Superson.
Arturo Blay
Editor del programa Hoy por Hoy Valencia desde...