Punto a punto, La Nucía se mete de nuevo en puestos de descenso

La Nucía

Quince empates en 28 jornadas o, lo que es lo mismo, igualdad en el mercador en el 53,5% de los partidos disputados en lo que va de competición liguera en el grupo dos de la Primera Federación. Esos son los números de una La Nucía tras un nuevo reparto de puntos, esta vez ante la UD Logroñés y en casa por 2-2, que vuelve a estar en puestos de descenso a la Segunda Federación aunque, eso sí, con un partido menos que el resto de sus rivales a la espera de medirse, el próximo 12 de abril, al Amorebieta.

Y la cosa podría haber sido peor, porque fueron los riojanos los que, por medio del senegalés Zourdine, se adelantaron en el marcador en el minuto 33, uno de esos tantos psicológicos que permitieron a los visitantes marcharse al descanso por delante el marcador, haciendo saltar todas las alarmas en la grada del Camilo Cano.

La Nucía, en cualquier caso, no bajó los brazos y nada más reiniciarse el choque fue Mariano el que colocó el empate en el luminoso, devolviendo el encuentro al punto inicial, algo que fue casi literal ya que volvió a ser la UD Logroñés la que se adelantó, en esta ocasión gracias a un penalti que, en el minuto 63, transformó Arregi.

Tocaba remar de nuevo y La Nucía lo hizo para subir el 2-2 definitivo, fruto de las botas de Javi Martín, en el minuto 76 para desatar un tramo final del choque en el que ambos equipos hicieron méritos para marcar el tercero y, con ello, llevarse los tres puntos.

Aquello no sucedió y a la postre La Nucía y la UD Logroñés sumaron cada uno un punto que no sirve de (casi) nada a ninguno de ellos. Los riojanos siguen en puestos de descenso y a seis puntos ya de la salvación y La Nucía vuelve a esa zona roja con 33 puntos aunque, eso sí, con un partido menos que sus rivales más directos.

Todo ello, una semana antes de viajar a la cancha de Nàstis de Tarragona, 12º clasificado con cuatro puntos más que los rojillos que, salvo que encadenen una buena racha de triunfos consecutivos en las próximas semanas, van a vivir cada uno de los diez partidos que tienen por delante como una auténtica final por la supervivencia.