La Comunitat Valenciana aplicará un plan de choque para frenar los accidentes laborales mortales, que han crecido un 20%

Valencia

Desde enero a diciembre de 2022 se produjeron en la Comunitat Valenciana 52.978 accidentes laborales, 2.529 casos más que ejercicio anterior. El aumento ya es significativo, del 5%. Pero es que ese incremento es mayor aún en el caso de los accidentes graves: 368 frente frente a 334, un aumento del 10%. Y si miramos los mortales, aún peor. El año pasado perdieron la vida por causas relacionadas con su trabajo 77 personas, casi un 20 por ciento más que en 2021. Y en lo que llevamos de 2023, 12 muertes más.

¿Qué está pasando? Pues la directora general de Trabajo, Bienestar y Seguridad Laboral, Elvira Ródenas, explica que los sectores con mayor incidencia siguen siendo construcción (17 fallecimientos) transporte y almacenaje (15) e industrias y manufacturas (13). Otras 13 muertes han sido por accidentes de tráfico.

Por provincias, Castellón fue la única que redujo las muertes en accidente laboral, un 50%, con un total de 8 el año pasado. Subieron en Valencia, que registró 40 casos (4 más que en año anterior) y sobre todo preocupa Alicante, con 29 casos, 17 más. Un repunte que está siendo analizado y que tiene que ver sobre todo con accidentes relacionados con la construcción y con el reparto, por lo que se ha reforzado la inspección en estos ámbitos.

En cuanto a las causas de estos accidentes: las caídas en altura suponen el 57% de ellas, otros 23% se corresponden con fallos en el uso de máquinas, por ejemplo, los atrapamientos. En cuanto a las caídas, llama la atención un nuevo fenómeno que está aumentando la siniestralidad: la instalación de placas solares, que ha proliferado mucho, y no siempre las empresas, directas o subcontratas, observan o hacer guardar todas las medidas de seguridad. De hecho, muchas empresas están utilizando drones para comprobar cómo están las cubiertas de naves o edificios antes de que suban a ellas los trabajadores.

En cualquier caso, todos estos accidentes, si se observan las correspondientes medidas de seguridad laboral, son evitables, como explica la directora general Elvira Ródenas. Respetar las normas y formar e informar a los trabajadores, es la clave.

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Y también, claro, está la inspección. El año pasado se realizaron actuaciones en más de 5.000 empresas, sobre todo en las que se consideraban de mayor riesgo, y se pusieron sanciones por valor de 8 millones, la mayoría por incumplir las medidas para prevenir riesgos laborales. Pero esta debe ser la última opción, más aún cuando casi siempre llega cuando ya ha habido algún accidente.

Así las cosas, el repunte de accidentes en general y el de mortales en particular, requiere de actuaciones concretas y urgentes. Por eso Ródenas avanza en la SER que se está ultimando un plan de actuación urgente, con medidas acordadas por la Inspección de Trabajo, el Invassat, la patronal autonómica CEV y los sindicatos mayoritarios UGT y CCOO. Un plan que se mantendrá todo el tiempo necesario, hasta que se puedan reducir esas cifras terribles, y que se centrarán, entre otras cosas, en reforzar la inspección.