La calle Alicante, una aberración urbanística

València

Al margen de creer poco en ese túnel de 260 metros que va a costar 16 millones y medio de euros, hoy quiero poner el acento en la tremenda paradoja que se producirá cuando entre a funcionar ese acceso subterráneo. Los usuarios del metro que transiten entre las estaciones de Alacant y Xàtiva en subterráneo van a poder desplazarse plácidamente, sin trastorno alguno, mientras que en la superficie, en la misma calle Alicante, el no usuario de metro,vaya el peatón, se tendrá que enfrentar a diario a la incomodidad de unas aceras estrechísimas , las que se encuentran entre la plaza de toros y el lateral de la estación del norte, aceras en las que apenas caben dos personas juntas.

Lo grave es que tuvo la oportunidad de enmendar esta aberración histórica urbanística hace muy poco al eliminar un carril de la calzada pero se prefirió destinarlo a carril bici en lugar de ampliar aceras. Curiosa manera de proteger al peatón en la ciudad en la que en teoría se está ganando el espacio público para la ciudadanía. Aquí desde luego no.