Último Pleno de la legislatura, entre reproches y lágrimas

Alicante

Pleno extraordinario en el Ayuntamiento de Alicante, el último de la legislatura. Una sesión marcada por los contrastes. Ha empezado con duros reproches entre las distintas bancadas ideológicas y con tintes electoralistas, pero ha terminado entre lágrimas por la despedida de los ediles que no repetirán en las listas de sus partidos.

Reproches que se han producido durante el debate sobre las modificaciones de créditos, a pesar de que han salido adelante por, prácticamente, unanimidad.

La de 9,7 millones de euros para, entre otras, garantizar la finalización de obras cofinanciadas con Europa y que no se pierdan esos fondos, solo ha sido rechazada por Vox porque critican las Zonas de Bajas Emisiones.

Y la de 1,3 millones para asegurar las ayudas a entidades festeras y otros 40 colectivos de la ciudad, ha contado con el apoyo de toda la Corporación, excepto Unidas Podemos, que se ha abstenido al entender que, en plena campaña, perseguía fines electoralistas.

Desde las filas progresistas, han acusado al alcalde Barcala de aprobar estas modificaciones a última hora por su incapacidad para gestionar. Miguel Millana, portavoz del PSOE, Xavi López, de Unidas Podemos, y Natxo Bellido, de Compromís, también le han afeado al alcalde el querer ocultar información a la oposición, como el grado de ejecución del presupuesto del pasado año que, presumiblemente, va a ser muy bajo.

Por su parte, la edil de Hacienda, Lidia López, se ha querido defender de los ataques de la oposición por la gran cantidad de dinero que no se ha invertido en la ciudad al no poder ejecutarse los distintos proyectos, en concreto, 122 millones de euros acumulados hasta la fecha.

Asegura que la difícil situación económica global ha obligado a guardar fondos como reserva para posibles imprevistos, aunque el remanente de tesorería del ayuntamiento nunca ha sido tan alto. Y ha cargado contra la oposición a la que acusa de no entender las reglas de la economía municipal.

El resto de la sesión ha transcurrido con un espíritu mucho más conciliador. De hecho, se han aprobado por unanimidad prácticamente todas las iniciativas desde ese momento, como la ordenación del futuro Parque Central, la modificación del PGOU para adaptarlo a la normativa vigente, o el hermanamiento de Alicante con Génova para, entre otras cosas, garantizar la salida de la Ocean Race las dos próximas ediciones.

Y una vez finalizada la sesión, se ha reservado una última intervención a todos aquellos ediles que, de forma voluntaria, han querido tomar el turno de palabra para despedirse de la Corporación. Momento en el que han aparecido las lágrimas en muchos de los concejales de esta legislatura.