Todo se blanquea (incluso los vergonzantes 50 puntos del acuerdo PP-Vox)

Alicante

Activamos el modo hogueras, qué falta hace. Cuando lo quememos todo, la próxima semana ya nos preocuparemos de que la Comunitat Valenciana ha entrado en la máquina del tiempo y vamos a regresar a ese Levante feliz y sencillo.

Los vergonzantes 50 puntos del acuerdo ya se dan por amortizados. Hay quien anticipa que la brillante gestión del PP en los próximos cuatro años va a eclipsar a sus compañeros ultras y va a arrinconar está declaración de principios.

Seamos pragmáticos, nos dicen. Aquí, lo que verdaderamente importa es la gestión de la pasta y cuando lleguemos a ello todo lo demás quedará diluido. Gato blanco, gato negro que más da, si caza ratones. Bajo esa premisa todo se blanquea. Pero, como dijo Ramoneda, no estamos ante una simple alternancia en el poder, es una preocupante deriva radical de dimensión europea.

Qué más da, por ejemplo, que se quiera aprobar una ley de señas de identidad con la que nos van a decir quién es el buen y el mal valenciano cuando la realidad es que hay casi tantas formas de valencianismo como habitantes de esta comunidad. Y esa es una de las grandezas de esta tierra: esa compleja forma de sentir o sentirse.

Bueno, pues ya nos preocuparemos por todo ello. Felices fiestas.

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