Aferrarse al sillón
La Columna de Carlos Arcaya: «Aferrarse al sillón»
Alicante
Que Carlos Mazón culpe todos los días a Ximo Puig y a Pedro Sánchez de aferrarse al sillón y retrasar el proceso por el que se convertirá en presidente de la Generalitat no es solo por una aspiración personal que, por otra parte, es lógica.
La prisa es política: pasar página y formar gobierno cuanto antes para intentar tapar esos pactos PP-Vox que están dejando en evidencia las muchas contradicciones y ambigüedades que protagonizan los populares al comprarle todo el marco ideológico a la extrema derecha.
Si van al diccionario y buscan el significado de la palabra aferrar, como verbo transitivo o intransitivo significa «agarrar fuertemente». Pero otra acepción es «plegar las velas» o «asegurar la embarcación a puerto echando el ancla».
En la coyuntura en la que estamos, Puig seguro que está por amarrar la nave socialista ante lo que pueda suceder, pero, mientras se cumplen los plazos, observa cómo los populares tienen que dedicarle un tiempo precioso a tapar incoherencias. Algo que también haría el popular si las tornas fueran otras.
En el caso de Sánchez, entiendo que a Mazón le gustaría que dejara su intenso tour por todos los medios de comunicación que le hacen un hueco y que se hiciera transparente. Como aspiración partidista para ponérselo más fácil a Feijóo, que no da igual en esos formatos, también es legítima.