Una buena hidratación para evitar golpes de calor
Especialistas del servicio de Urgencias del Hospital de Dénia subrayan la importancia de beber agua, pese a no tener sed, y evitar exposiciones al sol en las horas centrales
Dénia
El Jefe del Servicio de Urgencias del Hospital de Dénia, Dr. Antonio Barceló, destaca la importancia de una correcta hidratación para evitar golpes de calor y proteger la salud de la población ante la ola de calor que estos días azota la provincia de Alicante, con temperaturas superiores a los 40 grados en varias áreas y máximas de 42 grados en algunos municipios.
Aunque se espera que este calor extremo remita en los próximos días, los profesionales del Servicio de Urgencias del Hospital de Dénia, conscientes de los riesgos que las altas temperaturas y la exposición al sol pueden representar para la salud, ofrecen una serie de recomendaciones para disfrutar del verano y las vacaciones de manera segura y responsable.
El Dr. Barceló hace hincapié en la importancia de la hidratación, incluso sin sentir sed, así como evitar el consumo excesivo de bebidas con cafeína, alcohol o refrescos. “Debemos procurar, asegura, permanecer en lugares frescos, a la sombra o con aire acondicionado, y evitar la exposición solar y la práctica de deportes al aire libre durante las horas centrales del día, entre las 11:00 y las 17:00 horas. Además, matiza, es importante utilizar ropa ligera y de colores claros que permita una adecuada transpiración".
Los profesionales del Servicio de Urgencias también destacan la importancia de tomar precauciones al enfrentarse a las altas temperaturas. Aunque nuestro cuerpo tiene la capacidad de autorregularse y adaptarse a los cambios climáticos, la exposición a un calor excesivo o la presencia de factores de riesgo, pueden afectar el funcionamiento adecuado del organismo. Por lo tanto, es fundamental tomar medidas preventivas para garantizar su buen estado de salud.
"Las enfermedades asociadas al calor van desde calambres, que pueden ser un indicador temprano de que algo no va bien en nuestro cuerpo, hasta afecciones más graves, como mareos, aumento de la temperatura corporal con fiebre, pérdida súbita de conciencia o golpes de calor", advierten los especialistas.
Estas condiciones pueden afectar a personas jóvenes que realizan ejercicio intenso en las horas centrales del día y no se hidratan adecuadamente, así como a niños, ancianos y aquellos que toman ciertos medicamentos, como diuréticos o antidepresivos, que dificultan los mecanismos reguladores del cuerpo. Factores de riesgo como la obesidad, la diabetes y problemas cardíacos o renales también dificultan la capacidad de nuestro organismo para regular la temperatura corporal.