Reabiertas al baño las playas de Urbanova y San Gabriel, de Alicante
Estas dos playas, junto a la canina de Aguamarga, fueron cerradas el viernes por la mañana al detectarse en sus aguas altos niveles de enterococos
Alicante
Por cierto, que ya están reabiertas al baño las playas de Urbanova y San Gabriel, tras tener que ser cerradas ayer por un episodio de contaminación.
Las zonas de baño ondean este sábado la bandera verde tras el cierre de 24 horas por detectarse en sus aguas niveles de enterococos por encima de lo normal.
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Los resultados de los muestreos efectuados el viernes en las playas de El Saladar de Urbanova y San Gabriel en el acceso sur a la ciudad y conocidos este sábado son conformes y normales, por lo que han sido reabiertas al baño.
Estas dos playas, junto a la canina de Urbanova, fueron cerradas, recordamos, ayer por la mañana al detectarse en sus aguas niveles de enterococos por encima de lo normal dentro de los controles habituales establecidos en el Programa de Control de la Calidad de Aguas de Baño de la Generalitat Valenciana.
En las primeras comprobaciones realizadas por el Ayuntamiento para localizar el origen de la presencia de esta bacteria en las aguas se han descartado posibles vertidos procedentes del emisario y la depuradora en la zona de San Gabriel, así como escapes de la red controlada por Aguas de Alicante.
El Instituto de Ecología Litoral lo achaca a cierres puntuales por acumulación del turismo
Desde el Instituto de Ecología Litoral, con sede en El Campello, su director, Gabriel Soler, considera que son cierres puntuales, debido a bacterias que reflejan presencia de aguas residuales, más frecuentes por la acumulación del turismo en verano en ciertos partes del litoral, que también puede afectar a entornos más naturales.
Pero son episodios puntuales, dice, que no suelen durar más de 24 o 48 horas.
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Por cierto, que con la temperatura del agua del mar a 28 grados y la previsión de que en agosto pueda llegar hasta los 30 en agosto, advierte Soler de la invasión de flora y fauna invasora, que puede desequilibrar a la autóctona del ecosistema Mediterráneo.
Explica que las temperaturas de estos últimos días de 25,9, 27 grados e incluso 28 mar adentro, y que se notan aún más en las playas más cerradas, se deben a las dos olas de calor sufridas, y que pueden continuar en ascenso con una previsible tercer ola.
Son picos, dice, que se muestran luego en temperaturas ambiente de 39 y 40 grados en nuestro litoral, y que en el mar nos exponen a organismos procedentes incluso del mar Rojo, que aunque no sean tóxicos ni peligrosos, desequilibran el ecosistema.
Sonia Martín
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