Una mujer denuncia ante el Síndic de Greuges la falta de celeridad a la hora de acceder a una vivienda social

Alicante

Merien Taouil, vecina del alicantino barrio de Carolinas, fue desahuciada el pasado mes de mayo, a pesar de encontrarse en situación de vulnerabilidad, al ser viuda, contar con pocos ingresos y vivir con su hija menor de edad. En el momento del desahucio, la única ayuda que recibió por parte del Ayuntamiento fue un alojamiento de cinco días en un hostal.

Semanas más tarde, y gracias a los colectivos Sindicat de Barri de Carolines, Punto de Información y Denuncia de Derechos Sociales, Obra Social la PAH, Cometas y Sonrisas y Karam, consiguió que se emitiera un Informe de Emergencia Habitacional a su favor, necesario para poder acceder a una vivienda social de la Generalitat. Desde la entidad valenciana de vivienda y suelo (Evha) le han comunicado que, debido a la escasez de viviendas, deberá esperar, como mínimo, hasta principios de 2024 para acceder al alquiler que necesita.

Fernando Patón, portavoz del colectivo Punto de Información y Denuncia de Derechos Sociales, que está ayudando a Merien, pide celeridad al Ayuntamiento para que también a ella se le conceda una residencia, pues consideran que los criterios para asignar estas viviendas son arbitrarios.

La Junta General del Patronato de Alicante, aprobó en su momento las Bases Genéricas que regulan la adjudicación de las viviendas de arrendamiento del propio Patronato, acordando que se reservarán, en cualquier caso, un cupo de viviendas para el programa de Acción Social de emergencias, que supondrá entre un 5% y un 10% de las viviendas que queden disponibles cada año.