La Generalitat se compromete a pagar el aumento de las ayudas a la dependencia "cuanto antes" y con efectos retroactivos

València

Las cerca de 140.000 personas que reciben algún tipo de ayuda a la dependencia en la Comunitat Valenciana aún no han cobran el incremento de las subvenciones que se aprobó en el mes de julio. La Conselleria de Servicios Sociales afirma que no puede pagar ese incremento porque no hay dinero suficiente en las arcas de la Generalitat y señala a los anteriores gestores, los del Botànic, y al Gobierno central, que no aporta el 50 por ciento del gasto en dependencia que le obliga la ley. Compromís, sin embargo, acusa al actual Consell de mentir y recuerda que el Botànic triplicó las ayudas a la dependencia. Las familias, por su parte, aseguran que no pueden llegar a fin de mes

El decreto aprobado por el Consejo de Ministros en el mes de julio aumentaba las cuantías máximas que reciben las personas que cobran ayudas a la dependencia y también establecía mínimos. El problema es que, según la directora general de Dependencia, Beatriz Simón, la situación económica de la Conselleria de Servicios Sociales está en una situación crítica tras la salida del Botànic, hasta tal punto que han tenido que solicitar a la Conselleria de Hacienda una transferencia de crédito de 39 millones y medio de euros para terminar el año. Simón se compromete a que el aumento de esas ayudas se empiece a reflejar pronto en la cuenta de las familias afectadas y, además, anuncia que se pagará con efectos retroactivos, desde el mes de julio.

El Gobierno central no aporta el 50%

Beatriz Simó también pone el foco en el Gobierno central: recuerda que tiene la obligación de pagar el 50 por ciento de las ayudas a la dependencia pero en los últimos años, la media, es de solo el 11 por ciento, mientras que la Generalitat tiene que asumir el resto. La directora general de Dependencia asegura que es muy fácil gobernar con el dinero de otros aunque, pese a ello, se compromete a asumir el aumento de las ayudas a la dependencia.

En todo caso, el sistema de dependencia ha mejorado mucho, como demuestran los datos: en los últimos ocho años la realidad es que se ha triplicado el número de personas que reciben ayudas de dependencia: de los 41.000 beneficiarios de 2015 se han pasado a los 140.000 actuales. Algunos de ellos, como los que padecen Trastorno del Espectro Autista, insisten en que hay que aumentar más las ayudas, porque la inflación afecta mucho a las familias.

Las familias reclaman el incremento

Alejandro Amblar, portavoz de la plataforma Defensa TEA, explica que los cuidados para cada niño con trastorno del espectro autista cuestan 500 euros al mes y las ayudas no llegan a tanto. Pide a la Generalitat que aumente también otras subvenciones que no son las de dependencia pero están relacionadas, como las del transporte a las terapias o ayudas para las extraescolares.

Amblar lamenta que el Consell argumente que no hay dinero para pagar las ayudas a la dependencia y recuerda que muchas familias con personas dependientes a su cargo tienen problemas económicos.

Compromís: "Nunca un nuevo gobierno se había encontrado una situación tan buena"

Tras la acusación de la Conselleria de Servicios Sociales al anterior equipo de Políticas Inclusivas, liderado por la exvicepresidenta Aitana Mas, Compromís acusa al Consell de "desconocer" cómo se ha pagado el sistema de dependencia durante los últimos ocho años. La coalición recuerda que la gestión del Botànic permitió "mas que triplicar las personas beneficiarias" en ocho años de gobierno.

Fuentes de Compromís explican que, tanto la dependencia como la Renta Valenciana de Inclusión mantienen créditos ampliables, lo que significa que cuando se agota el presupuesto previsto para cada año se aprueban (o, al menos, así se hacía durante el gobierno de Puig) ampliaciones de créditos automáticas para la cantidad requerida. Unos aumentos de créditos que, según Compromís, se dejaron programados antes de acabar el mandato y que el actual Consell "debe ejecutar". Isaura Navarro, coportavoz de la coalición, acusa a la directora general de "mentir" al mantener que las cuentas estaban en estado crítico.

Los anteriores gestores de Políticas Inclusivas aseguran que "nunca un nuevo gobierno se había encontrado una situación tan buena como la que deja el Botànic" y piden al Consell de PP y Vox "voluntad para cuadrar la inversión social".