El Bidasoa de Irún despierta del sueño al TM Benidorm
El equipo vasco se impuso con claridad en el duelo de invictos de la Liga Asobal
Benidorm
El TM Benidorm puso fin este domingo a su racha de imbatibilidad en la presente edición de la Liga Asobal tras caer por un claro y contundente 24-31 ante el Bidasoa de Irún, un marcador que refleja claramente lo visto sobre el 40x20 en la peor tarde del equipo local en lo que va de temporada.
Tal y como se preveía antes del inicio de la sexta jornada de esta edición de la Liga Asobal, el duelo entre el TM Benidorm y el Bidasoa de Irún fue uno de los puntos álgidos del fin de semana. Dos equipos invictos que saltaron a la cancha del Palau d’Esports con la clara intención de no dejarse sorprender por el rival, fruto de lo cual los primeros minutos de juego se caracterizaron más por el estudio del contrario que por un juego vistoso y efectivo, lo que provocó que en esa primera parte de la contienda el marcador apenas registrara movimientos.
Fue el Bidasoa Irún el que, mediada la primera mitad, más rápido pareció encontrar los puntos débiles de un TM Benidorm fallón en ataque al que los pocos errores que cometía en defensa le salían excesivamente caros ante una enchufada ofensiva visitante.
Así, a falta de menos de diez minutos para el descanso, los de Benidorm se vieron cinco goles por detrás (6-11) obligando a Sergio Carballeira a pedir el primer tiempo muerto del partido para tratar, primero, de poner orden y, segundo, revertir una situación que comenzaba a ser muy preocupante.
Más información
Negados en la portería, donde el balón parecía tener un imán en los palos (y en el portero visitante, Harbaoui Mehdi), y desquiciados por no encontrar la solución a la sangría que seguía comprometiendo sus opciones de permanecer invictos, los nervios se apoderaron también del banquillo, en el que Sergio Carballeira vio la tarjeta amarilla por protestar una y otra vez las decisiones de los colegiados.
Pese a todo, la situación podría haber sido todavía más dramática de no haber sido por la presencia, de nuevo soberbia, del polaco Krystian Witkowski en la portería local, que volvió a enfundarse su traje de héroe para, al menos, maquillar la situación y llegar al descanso con un 8-15 en el luminoso.
Tras el reinicio del partido, las cosas apenas cambiaron. El TM Benidorm no encontraba la manera de parar a los visitantes, mucho más efectivos, de nuevo, en todas las parcelas de juego.
Lejos de ser el equipo rápido y de ataque venenoso que se había visto en las cinco primeras jornadas de competición, el TM Benidorm no pudo o no supo hallar la variante de juego que desarbolase a un Bidasoa Irún que, aprovechando que incluso el muro de Witkowski se desmoronó en el tramo final, fue aumentando paulatinamente su dominio en el campo y en el marcador hasta llevarse los dos puntos por ese 24-31 final.
Y todo, en diez minutos finales broncos y feos en los que la pésima actuación arbitral, plagada de errores de bulto que, al menos en este caso favorecieron en exceso los intereses de Bidasoa, llevaron a explotar al banquillo local, lo que terminó con la expulsión de Sergio Carballeira y un cabreo, como pocas veces se ha visto, del público presente en las gradas.