El PP asegura que no habrá recortes en los presupuestos del Ayuntamiento de València para 2024

València

Tras la aprobación de las ordenanzas fiscales en el pleno del Ayuntamiento de València, toca ponerse a cerrar los presupuestos municipales para el próximo año. Y si ayer el president de la Generalitat, Carlos Mazón, advertía de que se vienen unas cuentas duras por culpa de la herencia recibida, los populares en el consistorio se limitan a anunciar que serán realistas y que no habrá recortes.

Y es que esos presupuestos tienen antes que negociarse con los nuevos socios de gobierno, con Vox, que ya advierte de que hay que ir poco a poco, antes hay que comprobar que se cumple el acuerdo de gobierno.

Unos mil millones

El presupuesto del Ayuntamiento de València para 2024 rondará los mil millones de euros que se han alcanzado estos dos últimos años. Serán unas cuentas realistas y que atiendan las verdaderas necesidades de la ciudadanía.

Es lo poco que ha avanzado este martes el portavoz del gobierno local, el popular Juan Carlos Caballero, que asegura que están trabajando en unos presupuestos sin partidas ficticias que luego no se ejecutan.

Además, no habrá recortes, a pesar de la reducción de impuestos a través de las ordenanzas fiscales que han salido hoy adelante con los votos de PP y Vox.

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Vox pide paciencia

Pero Vox, el hasta ahora socio preferente y desde hace una semana compañero de gobierno, cree que es muy pronto todavía para hablar de presupuestos.

Su portavoz, Juanma Badenas, recuerda ese refrán de vísteme despacio que tengo prisa. Apela a la cautela. Cree que antes de negociar las cuentas tienen que desembarcar en las concejalías y sobre todo, comprobar que se cumple el pacto de gobierno.

La oposición augura recortes

Pero la oposición se muestra expectante y anuncia recortes habida cuenta de la reducción de los ingresos que va recaudar el Ayuntamiento.

Y es que el gobierno local calcula en 71 millones de euros la rebaja fiscal aprobada para el año que viene y eso conllevará un recorte en las inversiones y servicios públicos. Una rebaja fiscal además, que según el portavoz de Compromís, Joan Ribó, beneficia a los que más tienen.

Por ejemplo, con la reducción lineal del 20 por ciento del IBI, los que viven en barrios más ricos pagarán mucho menos, pero los que viven en zonas menos pudientes la rebaja apenas les dará para pagarse algún almuerzo.

Y la portavoz socialista, Sandra Gómez, recuerda que si el Ayuntamiento ingresa menos, se traducirá en menos becas, menos policías, menos actividades para los mayores o menos ayudas a los comercios de barrio. En definitiva, peores servicios y una València más injusta.

Gómez la califica como una "estafa fiscal" que se traduce ya en la paralización de inversiones en los barrios que ya estaban presupuestadas. Pone como ejemplos la eliminación del túnel de Pérez Galdós, pero también la reurbanización de la plaza de San Agustín, la avenida del Oeste y la calle San Vicente, la plaza del Ayuntamiento, los proyectos del Parque de Desembocadura, el Jardín de Jesuitas o el Bulevar Cultural, el polideportivo de San Isidro o el centro para gimnasia artística en las naves de Ership en el Grao.