Miguel Hernández en movimiento: belleza poética

Alicante

Un poco de poesía para comenzar la semana. Y no digo que vivir, despertarse, ir a trabajar, la rutina o las cosas pequeñas, si quieren prosaicas, no tengan también algo poético, que lo tienen. Y más con todo lo que está pasando en este mundo repleto de conflictos indignantes.

Hace unos días, el Telediario de La 1 nos contó que han descubierto en su archivo las únicas imágenes en movimiento que se tienen del poeta Miguel Hernández (Orihuela, 30 de octubre de 1910 - Alicante, 28 de marzo de 1942). Son de 1937 y aparece siempre en un segundo plano, entre sombras, en un Congreso de Escritores en Defensa de la Cultura.

De Hernández conocemos su voz, tenemos numerosas fotos, sabemos de la forma indigna que le reservaron para morir, pero hasta el momento no había ninguna filmación en movimiento. Se le ve sentado en el suelo y aplaudiendo, con la camisa arremangada, se mueve y se comporta como esperábamos que lo hiciera.

La visión de estas imágenes, quizás, como les digo, no tenga una gran trascendencia, pero sentimentalmente es emocionante. El poeta es patrimonio del pueblo alicantino y la filmación, si me lo permiten, tiene la belleza de los descubrimientos, de las cosas que aparentemente son inútiles, pero que ilusionan.