Lugares sin humos, lugares con (malos) humos
La UA ha iniciado el proceso para que el campus se convierta en una zona sin humos, mientras que la Generalitat volvió a permitir hace unos meses que se fume en las terrazas de bares y restaurantes
La Columna de Carlos Arcaya: «Malos humos»
Alicante
A todos, pero más a quien más proyección tiene, se les debe medir la responsabilidad con la que hace las cosas, aunque no sea su principal competencia.
Bajo ese parámetro, hay que alabar que el equipo rectoral de la Universidad de Alicante iniciara este jueves el proceso paulatino para que el campus de San Vicente se convierta en una zona sin humos. No solo es importante el compromiso con la lucha contra el cáncer, también lo es el mensaje que lanza a la sociedad una institución vinculada con el progreso.
Una medida en el buen camino. Algo que, fíjense, choca con el hecho de que la Generalitat hace unos meses volviera a permitir fumar en las terrazas de bares y restaurantes. Una vuelta atrás que contó incluso con el beneplácito de la Conselleria de Sanidad, pese a que conocen perfectamente la incidencia del tabaco en varios tipos de cáncer. En ese caso, el nuevo Consell no quiso mantener esa prohibición ni seguir siendo punta de lanza en ese avance porque en el resto de las autonomías se permite fumar en estos espacios al aire libre.
El camino del progreso no siempre es lineal, por eso hay que ensalzar a quien toma decisiones con valentía y no pensando en la popularidad coyuntural de las mismas.