Potries encarga sus propios análisis del agua del Serpis para asegurarse que está limpio de plaguicidas

Potries

El Ayuntamiento de Potries ha pedido a la empresa Citrosol que limpie por completo el producto que se vertió al río Serpis la jornada en la que se produjo el grave incendio industrial en esta fábrica. Todo indica que quedan restos de este plaguicida, que provocó la mortandad de fauna en el cauce fluvial, y que podrían desembocar en el río en cuanto llueva, un producto pues que procede de los alrededores de la fábrica y de los caminos.

En estos momentos la Confederación Hidrográfica del Júcar sólo ha remitido un correo electrónico en el que indica al Ayuntamiento que “la calidad del río no presenta toxicidad para las personas, y que se ha corroborado con la analíticas realizadas”. No obstante, el organismo dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica no ha remitido estos análisis al Ayuntamiento, que se ha visto forzado a costear sus propias analíticas, cuyos resultados no estarán disponibles hasta la próxima semana.

De este modo, el Consistorio de Potries asegura que mantendrá las medidas de prevención para las personas, animales y biodiversidad del Serpis, por lo menos hasta que tengan la certeza de que no hay peligro, o que el organismo competente recomiende oficialmente lo contrario.

Cabe destacar que la empresa TRAGSA retiraba del río hasta 1.200 kilos de peces muertos, incluidas anguilas, y que el miércoles de esta semana apenas había movimiento de vida acuática en la zona del río afectada por los vertidos procedentes el incendio, justo dos semanas después de que se declarase este fuego.