El Banco de Alimentos de Alicante recoge un 25% de aportaciones menos que el año pasado y espera compensar con la próxima campaña
El director del Banco, Juan Vicente Peral, lo achaca al cambiar las donaciones físicas de alimentos por las híbridas o las meramente económicas
Juan Vicente Peral, director del Banco de Alimentos de Alicante, en Hoy por Hoy Alicante
06:39
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/1701095595578/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Alicante
El Banco de Alimentos de la provincia ha registrado un 25% menos de aportaciones respecto al año pasado. Y ello se debe al cambio de modelo de recogida de alimentos, según ha alimentado en Hoy por Hoy Alicante, el director del Banco, Juan Vicente Peral, en Hoy por Hoy Alicante.
Esa es la principal razón, según ha explicado Peral, que confía en que en la segunda parte de la campaña estos malos datos se puedan compensar.
El motivo de esta merma es el cambio que han operado algunas cadenas de supermercados, que hasta antes del COVID eran recogidas de tipo físico en las cajas, pero que después empezaron a alternar la donación física con la meramente económica.
Más información
Esto, opina Peral, ha alejado el sentimiento de la gente y ha enfriado la compra de productos para los más vulnerables.
Un argumento que ha pesado en más de un tercio de las donaciones realizadas y que se agrava con la inflación y con otras complicaciones del país, señala.
Reconoce que determinados alimentos se han encarecido mucho, como el aceite, pero que a veces es mejor inclinarse por la compra de productos más económicos, para abarcar más beneficiarios.
En la provincia la recogida abarca 350 tiendas que cubren 14 cadenas alimentarias, de las cuales 3 o 4 son regionales.
Este pasado fin de semana se han hecho donaciones de productos no perecederos en algunos establecimientos, y donaciones monetarias en las líneas de caja. Y desde hoy hasta el 6 de diciembre la campaña continuará con donaciones monetarias en las líneas de caja.
Una merma de donaciones que se produce, mientras que la necesidad no solo no disminuye sino que aumenta.
Así lo evidenciaba Cáritas en su memoria de 2022 que, recordamos, recogía un aumento del 13% en número de atenciones, pese a tener lejos ya la crisis sanitaria de la COVID. También del número de beneficiarios, en un 14%, y que rozan ya las 57.000 personas en la diócesis Orihuela-Alicante.