Alicante

El Pleno ordinario en el Ayuntamiento de Alicante ha estado marcado por el rechazo a la mayoría de las iniciativas presentadas. De hecho, solo han salido adelante unas pocas, entre ellas, la subida de las tarifas de Aguas de Alicante, después de años congeladas, y la presentada por todos los grupos para exigir la variante de Torrellano y la retirada de las vías del tren de la costa sur.

El equipo de gobierno incluso ha perdido el apoyo de la ultraderecha en una iniciativa en la que atacaba al Gobierno de España por los acuerdos de investidura con los políticos catalanes. Vox se ha abstenido porque entiende que las autonomías del PP también están intentando aprovecharse de la situación al pedir la condonación de sus deudas.

También se ha rechazado la única moción presentada al pleno para crear una comisión municipal que elabore un plan integral de la recuperación del Casco Antiguo, propuesta por el PSOE. El PP, con el apoyo de Vox, la ha tumbado.

Los socialistas, que sí han contado con el apoyo del resto de la oposición, argumentan que, más allá de la comisión sobre el ruido que ya está en marcha, en el barrio existen otros muchos problemas por el abandono histórico por parte del Ayuntamiento, tal y como explica su edil Trini Amorós.

Algo que niegan desde el equipo de gobierno, donde aseguran que es uno de los barrios en los que más dinero se ha invertido históricamente, 120 millones calculan. Por ello, Toño Peral, edil de Proyectos del PP, considera que el Casco Antiguo no sufre de los problemas denunciados por los socialistas.

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Desde Vox, por su parte, han rechazado también la moción porque consideran que muchos de los puntos denunciados por el PSOE se tratarán en la comisión sobre el ruido en el barrio que ya está en marcha.

Sí ha salido adelante, sin embargo, la propuesta de la ultraderecha para crear una mesa que aborde los problemas del barrio de San Antón. Mesa que, al contrario que una comisión, no tiene por qué tener plazos concretos ni incluir a toda la oposición.

Tensión con los vecinos

Por cierto, en el Pleno se han vivido también algunos momentos de tensión entre el equipo de gobierno y los asistentes a la sesión como público. Un ejemplo de ello, cuando el PP ha bloqueado una declaración institucional de Compromís y Esquerra Unida - Podem en la que se pedía presupuesto para construir el centro social comunitario de Benalúa.

Ampliar

La derecha argumenta que ese centro se elaborará con fondos europeos y de la Generalitat, pero a los vecinos del barrio no les han convencido y han protestado ostensiblemente porque el alcalde Barcala les había prometido este centro en la pasada campaña electoral. Tanto, que el primer edil ha tenido que tomar la palabra para calmar los ánimos.

De hecho, posteriormente, algunos de esos vecinos han acudido a la zona por la que abandonan los políticos el Salón de Plenos para pedir explicaciones al alcalde por lo que entienden que es una promesa electoral incumplida.