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La Generalitat comenzará en enero la restauración del Palacio de Calatayud, en el entorno de la Catedral de València

Las obras de mejora cuentan con un presupuesto de 8,9 millones de euros y tienen un plazo de ejecución previsto de 24 meses

Fachada del Palacio de Calatayud, al lado de la Catedral de València, que comenzará a ser rehabilitado en enero / Generalitat Valenciana

València

La Conselleria de Hacienda, Economía y Administración Pública, a través de la Dirección General de Patrimonio, iniciará el próximo mes de enero las obras de restauración integral del Palacio de Catalayud, propiedad de la Generalitat.

Por su parte, la consellera de Hacienda, Ruth Merino, ha subrayado que uno de los fundamentos de esta rehabilitación “es conservar el patrimonio arquitectónico de los valencianos combinando el valor cultural e histórico de este edifico a la vez que se le da un uso administrativo a un edificio tan emblemático. Consideramos que dándole un uso de albergar sedes institucionales al servicio del ciudadano es la mejor manera de optimizar y preservar el patrimonio de la Generalitat”.

Las obras de rehabilitación cuentan con un presupuesto de 8.876.211 euros (IVA incluido) y la empresa constructora Víctor Tormo S.L. será la encargada de llevar a cabo estas obras. Está previsto que los trabajos duren 24 meses y permitirán recuperar 3.830,35 metros cuadrados de uso administrativo.

El Palacio de Calatayud es un bien inmueble del patrimonio cultural valenciano que está ubicado en el conjunto histórico de la ciudad de València, en concreto en el entorno de protección de los bienes de interés cultural de la Casa Vestuario, la Catedral, la Basílica de Nuestra Señora de los Desamparados y en el Área de Protección Arqueológica de Ciutat Vella.

Interior del Palacio de Calatayud, que comenzará a ser rehabilitado en enero de 2024

Interior del Palacio de Calatayud, que comenzará a ser rehabilitado en enero de 2024 / Generalitat Valenciana

Interior del Palacio de Calatayud, que comenzará a ser rehabilitado en enero de 2024

Interior del Palacio de Calatayud, que comenzará a ser rehabilitado en enero de 2024 / Generalitat Valenciana

El conjunto arquitectónico tiene su acceso principal en la Calle Miguelete número 5 y ocupa gran parte de la manzana formada por esta calle y las adyacentes (Calles Santo Cáliz y Horno de los Apóstoles).

Intervención unitaria

La Conselleria de Hacienda, como promotora de las obras, ha abordado la redacción del proyecto tras realizar diversas intervenciones previas (excavación arqueológica preliminar, demolición y retirada de tabiquerías y revestimientos impropios, análisis estructural y levantamiento de planimetría con técnicas láser-scanner) que han permitido conocer el estado actual del edificio y su subsuelo.

El inmueble, compuesto por dos edificios históricos, nunca ha sido objeto de una intervención unitaria, sino de una suma de intervenciones puntuales a lo largo de los años de mayor o menor envergadura que han tenido como resultado un edificio con grandes carencias de funcionamiento sobre todo en lo referente a materia de accesibilidad y seguridad, y que motivaron su desalojo en 2015.

De este modo, para poder restituir el uso administrativo y afectarlo al dominio público de la Generalitat, el edificio debe ser objeto de una importante obra de rehabilitación y restauración que resuelva todos sus problemas, recupere sus valores culturales y patrimoniales originales y los concilie con las exigencias de la normativa técnica vigente para las edificaciones y sus instalaciones y los requisitos funcionales propios del uso administrativo para el que va a destinarse.

En este sentido, Ruth Merino ha señalado que con esta actuación que vamos a comenzar en breve, “ponemos en valor los hallazgos arquitectónicos en busca de esa armonía que encontramos en la recuperación, en el fomento y en la puesta de relieve del patrimonio de los valencianos con la funcionalidad en los usos de un edificio del siglo XXI”.

Para abordar el proyecto se ha partido de la información obtenida sobre el inmueble en las fases de estudio previo histórico y arqueológico que se realizaron durante el año 2017. Asimismo, se adecúa a las condiciones exigidas por la normativa sectorial de habitabilidad, accesibilidad, seguridad, salubridad y eficiencia energética.

Conservación de estructura y fachadas

Las obras de rehabilitación serán consecuentes con la conservación de los valores propios definitorios de los dos edificios históricos que componen el inmueble. Además, la intervención pretende mantener tanto la estructura, configuración espacial y volumetría existente, como todos los elementos visibles desde viales y espacios libres públicos.

De esta forma, las fachadas se mantendrán intactas y solamente se realizarán los trabajos de consolidación y restauración necesarios, así como la sustitución de las carpinterías de madera por otras del mismo material pero con los estándares de calidad y aislamiento actuales que mejorarán de forma considerable la eficiencia energética del edificio.

Igualmente, en el Palacio de Calatayud se mantendrán los elementos que constituyen el esquema tipológico básico, en especial la escalera principal y las salas nobles, así como los elementos decorativos, pavimentos y carpinterías originales. En el caso del edificio que recae en la Calle Horno de los Apóstoles 3, se mantendrá su estructura, fachadas, cubierta, zaguán y escalera.

Otra de las premisas del proyecto ha sido que la planta baja del inmueble, de acceso al público, cumpla con los requisitos en materia de accesibilidad. Para lograr este objetivo, los dos accesos al conjunto serán accesibles desde la vía pública mediante rampas que cumplirán con la normativa de accesibilidad arquitectónica.

Asimismo, con esta actuación se ponen en valor los restos de las estructuras murarias que han quedado fosilizadas en la medianera entre ambos edificios, los cuales han sido datados de época islámica y posteriores. El proyecto trata de conciliar el uso administrativo del edificio con mostrar a la ciudadanía algunos elementos del patrimonio cultural que son testigo de las transformaciones que ha sufrido la ciudad de València a lo largo de los siglos.

Las intervenciones de restauración se centrarán en la parte del inmueble que corresponde con el Palacio de Calatayud. Estas pretenden preservar los valores del palacio, por lo que se mantendrá la distribución original, principalmente en las salas nobles de las plantas primera a tercera, escalera principal y pasillos.