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La comunidad educativa rechaza que se consulte a las familias sobre la lengua vehicular en los centros

El anunció lo hacia este martes en una entrevista concedida a Europa Press, el secretario autonómico de Educación, Daniel McEvoy

Imagen de la sede de la Conselleria de Educación / EUROPA PRESS

València

El anuncio lo hacía este martes en una entrevista concedida a Europa Press. El secretario autonómico de Educación, Daniel McEvoy, que calificó el proyecto de ley del Plurilingüismo como uno "bastante novedoso", añadía que la Conselleria cuenta ya con un borrador "muy avanzado" de la norma, pero que esta ha de pasar por Les Corts, de manera que puede experimentar modificaciones. La reforma de la ley de Plurilingüismo plantea una consulta a las familias para elegir la "lengua base" de cada centro.

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La fórmula a la que se apunta pasa por que "en cada centro se va a elegir una lengua base". De este modo, en las zonas castellanohablantes será el español "la lengua base del sistema, pero sí habrá un porcentaje de valenciano". Así, se pretende desarrollar "un proceso de consulta en las familias que acceden por primera vez al sistema e, incluso, en el primer año estamos viendo la posibilidad de hacerlo entre todas las familias".

Preguntado por las posibles críticas a que la lengua vehicular no sea marcada por un proyecto lingüístico aprobado por el Consejo Escolar, el secretario autonómico ha remarcado: "Nosotros lo que pretendemos es que la libertad de elección sea de los padres y de las madres de los alumnos".

Y en ese argumento ha insistido este miércoles el conseller de Educación José Antonio Rovira: la reforma de la Ley de Plurilingüismo que planea su departamento persigue garantizar la libertad del tipo de educación que quieren para sus hijos e hijas.

Jose Antonio Rovira, conseller d'Educació, considera que son los padres los que deben decidir qué importancia darle a una lengua u otra

Pero este anuncio ha generado rechazo en parte de la comunidad educativa

Escola Valenciana afirma que es una falsa libertad que crea desigualdades educativas, la presidente Alexandra Usó afirma que lo que debería hacer la Conselleria es fomentar el uso social del valenciano, normalizarlo, y añade que la mayoría de las familias no tiene ningún problema con la lengua. Pero es que además pone en cuestión el papel del Consell Escolar el órgano democrático de decisión en los centros.

Alexandra Usó, presidenta de Escola Valenciana, reivindica el Consell Escolar como un órgano democrático imprescindible en cada centro escolar

Desde la Federación de Asociaciones de Padres y Madres Enric Valor, la mayoritaria en la provincia de Alicante, también se rechaza esta iniciativa. Su presidente Javier Altozano, lamenta que se retrocederá en la enseñanza en valenciano. Pero también le parece muy grave que la responsabilidad de elegir el modelo se traslade a las familias, cree que aumentará el conflicto entre ellas.

Compromís afirma que la intención de la Conselleria de Educación de realizar referéndums para elegir la lengua base de cada centro educativo, “esconde la verdadera intención de crear una guerra entre familias para reabrir la batalla lingüística”. Según el portavoz de educación, Gerard Fullana, lo que tiene que explicar ahora el conseller José Antonio Rovira es si también van a realizar referéndums para decidir sobre todas las asignaturas y van a dejar de ser los especialistas quienes marquen los contenidos de matemáticas o de historia”.

Gerard Fullana, diputado de Compromís en Les Corts, califica la actual situación educativa como una "batalla lingüística"

En la misma línea el grupo parlamentario del PSPV que acusa a la Conselleria de Educación de querer "reabrir la guerra del valenciano por motivos partidistas y electorales" con su decisión de cambiar el modelo lingüístico en la escuelas. El portavoz socialista de Educación en Les Corts, José Luis Lorenz, considera esta medida "un nuevo ataque de la Conselleria del caos contra la enseñanza pública y contra la lengua", y afirma que tiene en contra a gran parte de la comunidad educativa.

Lorenz lamenta que la decisión de Educación no ha sido abordada ni con los sindicatos ni con las asociaciones de padres y denuncia que "el señor Mazón y la ultraderecha quieren generar enfrentamiento dentro del mundo educativo y así desprestigiar la enseñanza pública".