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Así se adaptan las ciudades de la Comunitat Valenciana a la Zona de Bajas Emisiones

En las ciudades de València, Castellón, Alicante y Elche, que superan los 50.000 habitantes, ya comienza a establecerse una Zona de Bajas Emisiones en los últimos días del año

Dos agentes de la Policía Local de València regulando el tráfico por la ciudad en una imagen de archivo. / Kai Forsterling (EFE)

València

La Ley del Cambio Climático y Transición Energética obliga a que todas aquellas ciudades y municipios de España que superen los 50.000 habitantes, tengan que establecer una Zona de Bajas Emisiones antes de que termine este 2023. Y quedan solo dos días. Así que hoy vamos a hacer un repaso por las principales ciudades de la Comunitat Valenciana para pulsar cómo se está aplicando, o no, esta normativa.

València: la Zona de Bajas Emisiones se restringe al área de Ciutat Vella

En la ciudad de València se acaba de aprobar una Zona de Bajas Emisiones descafeinada, para cumplir con el mínimo que exige la ley.

De hecho, lo que se ha hecho es renombrar como zona de bajas emisiones lo que hasta ahora se conocía como Área de Prioridad residencial de Ciutat Vella Nord, una zona que desde hace tres años ya está controlada por cámaras de acceso, que restringen el tráfico y sólo se permite la entrada a los vecinos.

Se trata eso sí, según fuentes municipales, en una decisión de carácter transitorio y provisional mientras se aprueba la Ordenanza correspondiente para dar cumplimiento a lo dispuesto en el Real Decreto. Un texto en el que ya trabajaba el anterior gobierno local y que incluirá otras medidas para el resto de la ciudad ya que se han recibido fondos europeos para la puesta en marcha de dichas medidas adicionales.

Eso sí, la pretensión del Ayuntamiento es que esas medidas adicionales no supongan restricciones relevantes a los derechos de vecinos y comerciantes y, al mismo tiempo, que los fondos recibidos no sean devueltos a Europa.

Castellón atrasa la implantación de la Zona de Bajas Emisiones para diciembre de 2025

Por su parte, Castellón cuenta, ahora mismo, con una moratoria del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana para atrasar la implantación de la Zona de Bajas Emisiones. Con el nuevo plazo, el objetivo es que esté finalizada en diciembre de 2025.

En el caso de la capital de la plana, cabe recordar que con el cambio de gobierno municipal en las elecciones de mayo, hubo un cambio también de proyecto de la zona de bajas emisiones por el que se eliminó la restricción de tráfico en lo que se conocía como la almendra central, una superficie de más de 745.000 metros cuadrados y que dejaba la mayor parte de la ciudad restrigida al tráfico.

El nuevo proyecto presentado por el gobierno de PP y Vox en la ciudad de Castellón no restringirá el tráfico en la zona centro y establece que solo se prohibirá el acceso, y de manera temporal, a los vehículos sin etiqueta en las zonas concretas que hipotéticamente puedan superar los niveles de contaminación permitidos.

Alicante, en el limbo

La implantación de las zonas de bajas emisiones en la ciudad de Alicante se presenta como una incógnita. Primero, porque el PP no ha aclarado aún si se retringirá el tráfico en los dos anillos que plantea y si se sancionará a los vehículos más contaminates.

Y es que, los populares, a pesar de que Alicante acogió el pasado mes de marzo la Junta de la Federación de Municipios y Provincias en las que se sentaron las bases para crear un modelo común de ordenanza, aún no han desarollado la normativa en Alicante.

Una ambigüedad que muchos interpretan para no enfadar a Vox, de quien previsiblemente dependerá la aprobación del presupuesto de 2024 y cuya línea roja es, precisamente, no aplicar restricciones ni sanciones en las zonas de bajas emisiones.

Precisamente, el Gobierno central concedía hace unos días una prórroga de un año para que Alicante implante las Zonas de Bajas Emisiones. Por lo que, en principio, se tiene de tiempo hasta 2025 para preparar la nueva ordenanza que, si sigue el modelo del modelo común de la FEMP, si debería incluir restricciones y sanciones a los vehículos más contaminantes.

Elche establece la Zona de Bajas Emisiones sin afectar al centro

A diferencia de Alicante, en la ciudad de Elche la nueva ordenanza de la Zona de Bajas Emisiones tiene un futuro definido: se aplicará, pero sin afectar al centro de la ciudad y con otras modificaciones que hacen que la oposición señale la perversión del sentido de la norma.

El gobierno ilicitano de Partido Popular y Vox ha explicado que este cambio en la normativa, por el que no se restringe el tráfico a la zona centro de la ciudad, responde a una intención por evitar que la ciudadanía se vea forzada a adquirir vehículos menos contaminantes.

Por otra parte, aunque se llevará a cabo la creación de plataformas únicas, se mantendrá el aparcamiento. Se trata de una decisión criticada por Compromís, quien considera que se corrompe la finalidad de este tipo de infraestructuras.

Sin embargo, PP y Vox consideran que Elche se encuentra por debajo de los parámetros de contaminación fijados por la Unión Europea, ya que, se tiene en cuenta el espacio del Palmeral, uno de los "pulmones verdes" de la ciudad.

Otra afirmación que, desde Compromís contradicen asegurando que la almendra central de la ciudad, según un estudio elaborado por la Universidad Miguel Hernández de Elche, sí supera los índices de contaminación marcados por la Organización Mundial de la Salud.

Manuel Gil

Redactor de Radio Valencia Cadena SER