En libertad con cargos los dos antimilitaristas que lanzaron pintura rosa a un tanque expuesto en la feria navideña Expojove de València

Valencia

Según el colectivo "Antimilitaristas MOC" (Movimiento por la Objeción de Conciencia), las acusaciones que han conocido los activistas son de delitos de “Injurias a las Fuerzas Armadas”, “Delitos contra las Instituciones del Estado”, y “Daños”. En un comunicado cargado de ironía y sobre el delito de 'Daños', el colectivo antimilitarista se pregunta si no es una broma hablar de daños cuando ese vehículo blindado está preparado para soportar impactos de munición pesada. Y añaden que no se trataba de una pintura cualquiera, sino de una pintura al agua ecológica, no tóxica y fácilmente lavable.

En el mismo comunicado el colectivo antimilitarista explica que desde 2017 'Antimilitaristes MOC València' "ha asistido a todas las inauguraciones para denunciar la presencia de instituciones militares en la feria de la infancia y la juventud de la ciudad de València, que debería ser coherente con los valores educativos de la paz y la no violencia". Ya ese año, recuerdan, se hizo entrega de una cesta con carbón al entonces concejal de Cultura Festiva, Pere Fuset, "por desoír a las más de 60 entidades sociales y educativas valencianas que reclamaban la desmilitarización de Expojove y faltar a la verdad al afirmar que el estand militar solo lo ocupaba la Unidad Militar de Emergencias (UME), falsedad que se repitió durante el resto de años de su cargo".

Asimismo, los antimilitaristas también subrayan que desde 2018, año en que se formó el “Jejejército del Moc-moc”, cada año han acompañado a la comitiva municipal el día de la inauguración de la feria para mostrar que la presencia de las Fuerzas Armadas y otras instituciones armadas en una feria infantil y juvenil "supone una normalización peligrosa y cierta apología de los medios violentos de resolución de conflictos que contradice los valores de paz, resolución noviolenta de los conflictos y diálogo que deben regir la educación de los y las jóvenes, valores consagrados en las leyes educativas".

Que ante la presencia este año de armamento real y de vehículos de combate el colectivo decidió elevar el tono de su protesta "en un gag": un payaso y una payasa se lanzaban mutuamente pintura rosa sobre el tanque. Y añaden que "no se trataba de una pintura cualquiera, sino de una pintura al agua ecológica, no tóxica y fácilmente lavable, como se pudo comprobar pocos minutos después".

Por todo ello, Antimilitaristes-MOC València califica de "desproporcionados y disparatados" los cargos formulados contra la pareja de activistas que consideran que "pueden deberse a la gran irritación que habría causado entre altos mandos militares la acción sobre el blindado de combate, así como a la reacción de algunos representantes del consistorio, como el portavoz municipal de VOX y segundo teniente alcalde, Juan Manuel Bádenas, o la propia alcaldesa de València, María José Catalá. A quienes sería importante recordarles que la cultura democrática consiste en aceptar la protesta social como parte de una sociedad plural e inclusiva. Y que la desobediencia civil y las acciones directas noviolentas forman parte de la historia de las democracias occidentales, siendo una herramienta de participación social y política radicalmente democrática".