Discrepancias entre el equipo de gobierno de Castellón ante la posible recuperación de un monumento con una cruz en el Parque Ribalta un año después de su retirada
La cruz fue retirada el 4 de enero de 2023
Este jueves se cumple el aniversario de la retirada de la cruz del Parque Ribalta después de que la Dirección General de Calidad Democrática determinara que el monumento "a los caídos" es un vestigio de exaltación franquista.
En el día del aniversario de su retirada, Vox --que forma parte del equipo de gobierno en Castellón-- ha reiterado su compromiso de "hacer todo lo posible para poner una cruz en el Parque Ribalta en favor de la libertad religiosa".
Y desde el Partido Popular --la otra parte de la sociedad de gobierno-- aseguran que desde el consistorio se actuará en base al acuerdo firmado por ambas parte.
El acuerdo, en este sentido lo que recoge es el compromiso de ubicar en un lugar relevante de la ciudad una escultura o monumento que honre la memoria y mantenga el recuerdo a las víctimas de la violencia.
Largo proceso de retirada
En las dos últimas legislaturas, el proceso de retirada de la Cruz del Ribalta de Castelló se convirtió en uno de los objetivos del equipo de Gobierno.
Cabe recordar que el Ayuntamiento tuvo que sacar a licitación, por tercera vez, la retirada de la Cruz del Ribalta, después de que la última licitación quedara desierta.
A finales del mes de agosto de 2022 el Ayuntamiento de Castelló informó de que la empresa Solaris Purgaret, encargada del proyecto por concurso público había remitido un escrito en el que solicitaba la paralización del contrato y de los plazos de ejecución con el argumento de la existencia de un contencioso administrativo interpuesto por Abogados Cristianos contra la adjudicación.
Más, tarde, el consistorio volvió a iniciar el proceso y la licitación quedó desierta por falta de ofertas. Ha sido la tercera vez en la que se ha llevado a cabo este procedimiento el que parece que acabará definitivamente con el tralado de la Cruz del Ribalta.
La Dirección General de Calidad Democrática determinó que el monumento es un vestigio de exaltación franquista. Cabe señalar que el consistorio disponía de la autorización de la Dirección General de Cultura y Patrimonio de la Generalitat Valenciana para ejecutar el proyecto de retirada del monumento y ampliación del jardín del parque Ribalta, Bien de Interés Cultural
