El Levante buscará otro escenario de juego para acercar a su equipo femenino a la capital hasta que construya la Ciudad Deportiva de Nazaret
Según ha podido saber la Cadena SER, el club valora un cambio de campo para la disputa de los partidos de la primera plantilla porque la distancia con Buñol está siendo un factor determinante para que muchos abonados no se desplacen para apoyar a la plantilla que dirige Sánchez Vera
Valencia
El Consejo de Administración del Levante quiere que su equipo femenino cuente con el apoyo de una afición que ha respondido a los partidos que ha disputado puntualmente en el Ciutat de València pero que es incapaz de llenar las escasas 500 butacas del campo principal de la Ciudad Deportiva de Buñol.
Mucho esfuerzo económico, mucho trabajo del cuerpo técnico que dirige magistralmente Sánchez Vera y mucho talento entre una gran plantilla, para obtener una escasa respuesta social y por debajo de las expectativas que el equipo se ha ganado sobre el césped, clasificándose para una ronda previa de Champions League o metiéndose en la final de la Supercopa que disputará ante el FC Barcelona.
El fútbol femenino adquirió una nueva dimensión con la llegada del Real Madrid a la Liga F, con un Barça redoblando esfuerzos para ser campeón de todo en España y en Europa y con el empujón mediático que supuso la conquista del Mundial para nuestro país.
Sin embargo, algo falla cuando todo ese 'boom' no se ha podido monetizar, ni se ha incrementado en asistencia de aficionados en Buñol con un equipo que tiene a la pichichi de la pasada temporada y nominada al balón de oro, Alba Redondo, que cuenta con otras jugadoras internacionales como María Méndez, Paula Tomás o futbolistas de primer nivel como la colombiana Mayra Ramírez, la brasileña Gabi Nunes o la sueca Emma Holmgren.
Según ha podido saber la Cadena SER, el club va a sondear varios escenarios para que el primer equipo femenino no juegue sus partidos en Buñol porque considera que la distancia está siendo un factor determinante para que muchos de los 15.000 abonados granotas que acuden a la llamada del derbi, a partidos puntuales frente al Real Madrid o el Barça en Orriols nunca se desplacen hasta la Ciudad Deportiva.
La complicada situación económica del club impide abrir cada fin de semana el estadio Ciutat de València por los gastos que genera en equipamientos para la retransmisiones televisivas, seguridad y taquillas pero el Consejo tampoco quiere renunciar a que el equipo encuentre un lugar en el que se pueda sentir mucho más arropado y en los partidos se genere un clima más cálido que la frialdad que transmite la ciudad deportiva de Buñol.
José Manuel Alemán
Redactor de Deportes en Radio Valencia