El presidente de la CEOE, la patronal española Antonio Garamendi afirma que el debate sobre el agua debería estar sobre la mesa de los grandes temas nacionales, como las renovables y por supuesto la situación crítica del sector de la cerámica, que aporta el 30% de PIB nacional. Antonio Garamendi se ha reunido con el presidente Mazón antes de participar en la ejecutiva de la CEV, en el que ha sido su primer encuentro institucional tras las elecciones y ha destacado la importancia de la ampliación del puerto de Valencia, que considera fundamental para la industria española. Asimismo, ha afirmado que sobre la mesa debería ponerse el debate sobre el agua, un debate serio y riguroso y que sea ajeno a intereses identitarios. El presidente Mazón agradece el respaldo de la patronal nacional a las grandes preocupaciones de la Comunitat Valenciana, también a la reclamación de la segunda pista del aeropuerto de Alicante y la ampliación del de Manises y afirma que tras el éxito con la ampliación del puerto se abre una nueva etapa reivindicativa en materia de agua. Carlos Mazón afirma que la patronal valenciana ha anunciado que estará presente en la mesa del agua que se constituirá en el primer trimestre de este año y cree que como lo ha sido para la ampliación del puerto el respaldo de la patronal nacional a las reivindicaciones será fundamental para tener éxito. El jefe del Consell ha anunciado que el próximo día 30 se constituirá oficialmente la mesa de diálogo social en la que participan la patronal y los sindicatos y la vicepresidenta segunda Susana Camarero y que en este primer trimestre de este año se presentara el plan simplifica para reducir los trámites burocráticos que permitan agilizar las inversiones y el desarrollo de proyectos. El presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha asegurado este jueves que «por supuesto» que están dispuestos a hablar de la jornada laboral, pero no «porque venga una señora a imponernos su criterio porque es su hito y medida estrella». Garamendi se ha pronunciado así en València sobre el anuncio del Ministerio de Trabajo que dirige Yolanda Díaz de que el 25 de enero abrirá una mesa de diálogo social para negociar con los agentes sociales la reducción de jornada laboral, uno de los puntos incluidos en el acuerdo del Gobierno PSOE-Sumar. «Aquí lo que se está en elecciones, aquí lo que se está jugando es un partido porque hay elecciones pasado mañana en Galicia, al día siguiente en el País Vasco, al día siguiente en Cataluña, al día siguiente en Europa», ha señalado Garamendi, quien ha alertado: «Esto son las cosas de comer, y con las cosas de comer no se juega». Garamendi ha afirmado que si hay una ley que dictamine la reducción del tiempo no podrá decir que no es legal, pero sí es «un desprecio al diálogo social total», a pesar de que se usa tanto la palabra diálogo, y ha alertado: «Será legal, pero lo que va a hacer es paralizar absolutamente las relaciones laborales en este país». Ha defendido que la patronal es parte importante con los sindicatos del diálogo permanente bipartito, que a veces es difícil, pero da sus frutos, de manera que en España hay abiertas 4.500 mesas de diálogo social bipartito, por empresas y sectores. Asimismo, ha añadido que son mesas que llevan muchos años abiertas y generan paz social, y ha recordado que en mayo firmaron con los sindicatos el acuerdo nacional de convenios y desbloquearon la negociación colectiva, lo que ha ido «muy bien para España», pues evitó la inflación «de segunda ronda» y se dio una estabilidad de tres años. Garamendi ha lamentado que el que Gobierno de España «rompa esa estabilidad» y se ha preguntado por qué no lo comunicó el Gobierno anteayer, cuando se aprobó el salario mínimo interprofesional, porque esto es «otra subida implícita» del SMI «claramente, sin consultar». «Lo que crea es una incertidumbre tan importante como que nosotros estamos avisando a las distintas organizaciones: cuidado con lo que se pacta, es que va a bloquear la negociación colectiva, la están bloqueando; es un tema muy preocupante», ha aseverado. El presidente de CEOE ha explicado que, en estos momentos en España, según datos de la EPA, la media de horas trabajadas a la semana es de 39,5 horas, pero las reales son 34,5, y se ha preguntado por qué no se habla del absentismo, que «se ha disparado en España». Garamendi ha señalado a quienes dicen que los empresarios son «unos rácanos» que él nunca dirá eso ni que los trabajadores «son unos zánganos», porque esas manifestaciones «son un error» y el éxito de España reside en sentarse en la mesa y llegar a acuerdos. En su opinión, lo único que se va a conseguir de esa manera es generar más desconfianza en este país, igual que cuando se dice que los directivos «son abusones» o «no trabajan», y se ha preguntado cuál será el próximo anuncio del Ministerio de Trabajo. El presidente de la patronal CEOE, Antonio Garamendi, ha reprochado a la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, que haga «populismo» sobre los sueldos de los dirigentes empresariales, después de esta haya reclamado abrir un debate sobre los «elevadísimos» salarios que perciben los directivos. «Se resume muy fácil: empieza por P y acaba por o populismo», ha afirmado en València Garmendi preguntado por su opinión de las declaraciones de la ministra, de quien ha dicho que mensajes como este generan «falta de confianza» y «preocupación de la gente» sobre «hasta dónde vamos a llegar». Garamendi ha comparado las declaraciones de Díaz con ir a un partido de fútbol y encontrarse con el árbitro vestido del mismo color que el equipo contrario, y ha añadido que con esos mensajes «desvirtúa el diálogo social». A su juicio, «que una ministra de España esté hablando de un intervencionismo tal, de república bananera, pone en peligro» que vengan las inversiones, ha aseverado el presidente de la CEOE, para quien «no vale ya todo». «Si queremos que los directivos de este país se vayan fuera de España, si queremos que el talento se vaya fuera de España, si queremos perder el tren, si lo que queremos no es crear riqueza, sino repartir la pobreza, pues juguemos ese partido», ha indicado Garamendi, quien ha señalado que ante estos mensajes va a sonreír por no pensar de otra manera.