El deterioro que sufren las instalaciones del Conservatorio Profesional de Danza de Valencia amenaza la integridad del alumnado

València

Las instalaciones del Conservatorio Profesional de Danza de Valencia presentan evidentes signos de deterioro, y prueba de ello es que el mal estado de sus aulas ha comenzado a afectar incluso a la salud y a la integridad física de los más de 400 escolares, menores de edad en su mayoría, que estudian en el centro.

Es la denuncia que trata de visibilizar la Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA) de este conservatorio, cuyos miembros aseguran que el edificio arrastra problemas desde hace décadas -relativos, por ejemplo, a la red eléctrica, a las cornisas o al suelo-, a los que ahora se han añadido otros nuevos, como una plaga de ratas, el cierre de la cafetería y el desgaste de muchas de sus clases. Un desgaste que, de hecho, ha llegado a ocasionar una sucesión de lesiones entre los niños, adolescentes y jóvenes que hacen uso de la infraestructura.

Múltiples carencias

El presidente de la AMPA, Juan Ramón Martínez, ha explicado a la Cadena SER, en una entrevista en el magacín Hoy por Hoy Valencia, que las múltiples carencias que tiene el centro requieren "muchas actuaciones". "Su interior se ha ido deteriorando con el paso del tiempo y ahora mismo hay aulas en las que es imposible desarrollar las actividades propias de las diferentes modalidades de danza que aquí se aprenden, con los suelos completamente abollados o levantados", ha señalado.

Tras más de dos décadas reivindicando -sin éxito- una mayor inversión para adecuar los espacios a su actividad diaria, la situación ha alcanzado un grado de peligrosidad elevado, con el cierre de varias aulas en las que es "imposible" que los estudiantes puedan realizar ejercicios. Así que las exigencias más inmediatas de la asociación pasan por "efectuar una revisión integral y un buen mantenimiento de todas las salas, arreglar la caldera para que no pasen frío y abrir la cafetería".

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Una demanda, la de la apertura de la cantina, que Carmen Planells, secretaria de la AMPA, califica de "importantísima". Y lo argumenta: "Era el sitio donde los alumnos se reunían y los padres esperaban a que sus hijos salieran de clase, además de ser el lugar donde podían comer o comprar platos calientes y agua. Ahora, con su cierre por un problema de licitación, no pueden hacer nada de eso, y ni siquiera tienen una alternativa donde comer de tupper y poder calentarse la comida que traen de casa, lo que hace que busquen zonas tan extrañas como el cuarto de baño o cualquier sala que esté libre".

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Eso en cuanto al corto plazo, mientras que en el largo piden que se construya un conservatorio "propio" en la ciudad de València "para que cubra las necesidades del centro profesional de danza", que actualmente se encuentra en un espacio compartido con la Escuela Superior de Arte Dramático (ESAD) y el Conservatorio Superior de Danza.

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Falta de actuación política

Juan Ramón ha lamentado la falta de compromiso político para poner fin a la situación que atraviesa el conservatorio. "Nosotros queríamos que se pudiera recuperar un proyecto que se remonta a tres legislaturas anteriores, por el que se construiría un nuevo conservatorio en un solar que hay disponible frente al Palau de les Arts. Llegamos a un acuerdo con la Administración a principios de mayo de 2023, pero luego hubo un cambio de gobierno autonómico y los nuevos dirigentes no nos han convocado, a pesar de haberlo solicitado varias veces. Lo que sí sabemos es que esa ubicación se ha desestimado y se están barajando otras posibilidades, aunque no hay nada concretado".

Por su parte, la Conselleria de Educación, consultada por Radio Valencia, afirma que iniciará "una serie de reuniones con el propósito de avanzar en la materia" tras haber visitado las instalaciones hace ahora una semana.