Los comerciantes del centro histórico quieren un "verbenódromo" para las próximas Fallas

València

Una vez quemadas las Fallas 2024, hacemos balance con los principales implicados en el desarrollo de unas fiestas que movilizan a toda la ciudad. La suciedad, los puestos ambulantes de comida y bebida, las verbenas, el descanso o los problemas de movilidad vuelven a ser los aspectos a mejorar de cara al próximo año, tal y como han explicado en Hoy por Hoy Valencia comerciantes, vecinos y hosteleros. Por su parte, desde el Ayuntamiento de València, los responsables de la limpieza y gestión de residuos se muestran medianamente satisfechos.

Los más críticos han sido los comerciantes del centro histórico. La gerente de la asociación que les agrupa, Julia Martínez, ha llegado a pedir que el año que viene se instale un "verbenódromo" donde todas las verbenas "puedan llevarse a cabo sin interferir en la vida ciudadana, y donde el coste de la limpieza sea "asumido por quienes se benefician, y no como ahora", a cargo del erario público, puesto que "se ha demostrado, desgraciadamente, un año más, que allí donde se llevan a cabo las consecuencias negativas, repercuten en todo el entorno, y no solo en la demarcación o el recinto de la Falla que lo organiza".

Además, Martínez ha pedido que se tenga la misma vara de medir con los puestos itinerantes que se desplazan a la capital durante las semanas de Fallas, como algunas churrerías o buñolerías que, dice, obstaculizan la visión de los comercios del barrio. Cree que eso incumple el plan especial de protección de Ciutat Vella.

Llamada contra el incivismo

Desde la federación vecinal de València, su presidenta, María José Broseta, ha vuelto a denunciar el incivismo que se respira en Fallas. Aunque ha explicado que la federación está a la espera de recabar información de las asociaciones de todos los barrios, para ofrecer un balance detallado de cómo han transcurrido las Fallas en todos lo puntos de la ciudad, la dirigente vecinal ha lamentado que la imagen en algunos momentos y puntos ha sido de "vómitos y suciedad en las calles, y que los servicios de limpieza no daban abasto".

Por su parte, desde Hostelería Valencia, Rafa Ferrando celebra las buenas cifras de ocupación. El pasado fin de semana fue el de mayor afluencia, y aunque el lunes y ayer martes hubo menos gente, igualmente las calles estaban repletas y eso se notó en restaurantes y hoteles. Resalta también que, de cara al año que viene, hay que mejorar la gestión de los residuos y la suciedad, y coincide con los comerciantes en que hace falta limitar la actividad de los puestos ambulantes.

2.100 toneladas de ceniza y arena

Por su parte, el concejal de Limpieza, Carlos Mundina, se ha mostrado "medianamente satisfecho" con la gestión que se ha hecho en la ciudad estas fiestas. Ha detallado que desde el 12 de marzo se han recogido 8.000 toneladas de residuos y, solo en la noche de la Cremà, los servicios de limpieza retiraron 2.100 toneladas de ceniza y arena.

Señala que ha habido más operarios de limpieza en la calle que nunca, se han reforzado los baldeos. Y aunque el balance y el presupuesto señala que son los adecuados, anuncia que el año que viene se instalarán más papeleras, se adelantará la instalación de urinarios y se vallarán antes los edificios protegidos.