Con motivo del Día Mundial del Agua el Ateneo Cultural verde ha realizado una interesante y comprometida charla
Vicente Richart Díaz, director técnico de la Junta Central de Usuarios del Alto Vinalopó ha compartido ante medio centenar de personas, entre los que se encontraban el concejal de Medio Ambiente, Francisco Iniesta, y el ex director general de la EPSAR, Juan Ángel Conca, información detallada sobre la situación de los acuíferos del Alto Vinalopó, el origen de la problemática y las perspectivas de futuro
Villena
Con numerosos datos, remontándose a los inicios del siglo XX donde las aguas caballeras estaban presentes en nuestra ciudad y analizando los momentos de explotación agrícola y desarrollo de la provincia a los que los acuíferos del Alto Vinalopó han contribuido, se centró en la situación actual de las distintas masas de agua y las dificultades para frenar la sobreexplotación.
Apoyándose en gráficas y ejemplos, el ponente explicaba las tendencias que llevan a algunos acuíferos a estabilizarse, mientras que otros permanecen sobreexplotados y las posibilidades de recarga. Estimando en 45 Hm3 lo extracción anual de agua del subsuelo señalaba, entre otros ejemplos, cómo el acuífero Jumilla-Villena ha descendido 150 m desde 1965 sin que se haya logrado frenar el descenso, mientras que el Villena-Benejama ha bajado 240 m (8,5 veces la altura de la Torre del Homenaje del Castillo de Villena) pero, ahora tiende a la estabilización.
Considerando como primordial objetivo el de garantizar la sostenibilidad de los acuíferos, puesto que de ahí se derivarán objetivos medioambientales, agrícolas y socioeconómicos, ha hecho referencia a las grandes inversiones que permiten trabajar el en equilibrio hídrico por un valor de más de 700 millones de euros: trasvase Júcar-Vinalopó 400 millones, modernización de regadíos 120M, desalación 10M, postrasvase 120M, reutilización 40M. Esto está permitiendo un trabajo intenso, coordinado e integral que trata de solucionar los problemas de los acuíferos sobrexplotados. Cree Richart que desde el inicio, el mayor obstáculo ha sido el precio del agua del trasvase dado la necesidad de impulsarla después del cambio de toma a Cullera. Para ello, se ha propuesto un proyecto de energía fotovoltaica que ha secundado el Ministerio para la Transición Ecológica con más de 90 millones de euros que se incluyeron en los Presupuestos Generales del Estado de 2023.
Para finalizar, señalaba el ponente que la firma del convenio con el Ministerio, introduciendo también a los ayuntamientos en la compensación de costes, con un precio adecuado (19 cents/litro) garantiza la protección de los acuíferos, aunque no están exentos de amenazas, como es el impacto del cambio climático o la posibilidad de que se quiera implantar en la zona una agricultura extensiva, cuando el objetivo es mantener al pequeño y mediano agricultor.
Tras la exposición, un interesante turno de preguntas puso de manifiesto la importancia y el interés por la problemática de los acuíferos por parte de los asistentes.