El gallo, el perro y la zorra

Alcoy

Para esta ocasión he elegido otra fábula de Esopo que habla de la lealtad.

Un gallo y un perro vivían tranquilos y felices en una granja. Un buen día, una zorra hambrienta se acercó con la intención de comerse al gallo. Al ver al perro le dijo:

- Si me permites llevarme al gallo, te daré algo muy delicioso a cambio.

El perro, leal a su amigo el gallo, se negó sin pensárselo dos veces. La zorra no se dio por vencida y fue en busca del gallo:

- Amigo gallo, ven conmigo y descubre por ti mismo todas las delicias que tengo en mi madriguera.

El gallo le respondió:

- Me encantaría, pero primero deberías pedirle permiso a mi amigo el perro.

La zorra se dio cuenta de que sus planes habían fracasado y se fue con las manos vacías, mientras que el gallo y el perro celebraban su astucia y lealtad.

Esta fábula nos enseña que con astucia y lealtad se pueden superar incluso las situaciones más peligrosas. Nos recuerda la importancia de ser fiel a tus amigos y ser inteligente en situaciones complicadas.

Nos invita a valorar nuestras relaciones, a actuar con inteligencia y lealtad, sobre todo cuando algún “zorro” de la sociedad se empeña en poner a prueba nuestros lazos de amistad con otros. Nos recuerda que las amistades se basan en la confianza y el respeto mutuos.

El perro representa la lealtad, la importancia de ser fiel a los amigos; el gallo, la astucia y la importancia de ser cauteloso y no creer a la zorra; y la zorra representa el engaño.

Ahora analizando nuestra manera de ser y actuar ya podemos saber si somos el perro que cuida del gallo, el gallo que le es leal al perro y no lo abandona por falsas promesas, o el zorro que promete mucho para acabar con la amistad del perro y el gallo.