La Euroliga y la frustración de La Fonteta

De la extensa entrevista que ayer mantuvimos en SER Deportivos con Enric Carbonell, me quedo fundamentalmente con una idea transmitida por el director general taronja. Si Valencia Basket consigue una posición más estable, más segura, con más continuidad en la Euroliga cuando se produzca el traslado al Roig Arena, el club tendrá que aumentar el presupuesto. Parece evidente que el ambiente de crispación permanente, el descenso en la afluencia de público en La Fonteta y, en una palabra, la frustración de la afición ha calado ahí dentro. Esto va de disfrutar, de ver a grandes jugadores en el pabellón, del prestigio de estar en la mejor competición europea de basket. Pero, sobre todo, va de ganar, de estar lo más arriba posible, de exigencia. Para eso, hay que tener una plantilla más cara, mejor pagada. Y, por supuesto seguir con el proceso de transformación del club. Ser Euroliga es mucho mas que obtener una licencia A. Hay que cambiar por dentro, a todos los niveles.