Los bomberos fuerzan una reunión con Barcala para evitar las protestas en la Nit de la Cremà

Alicante

Mañana se decidirá si se mantienen o no las protestas de los bomberos municipales de cara a la Nit de la Cremà. Después de días intentando lograr reunirse con el alcalde Barcala para negociar una mejora de las condiciones laborales, el primer edil ha aceptado hoy reunirse con los mandos este sábado por la mañana.

Es un compromiso que le han arrancado a Barcala hace solo unos minutos, poco antes de la mascletà. Desde la Plataforma de Funcionarios de los Servicios Especiales de Hogueras, quienes han capitaneado las protestas, señalan que intentarán estar presentes en ese encuentro con jefes de servicio y sargentos, los responsables de los equipos que deberán apagar las Hogueras.

En cualquier caso, apunta Manuel González, bombero y portavoz de la plataforma, estarán representados por varios mandos que sí han apoyado las protestas. Añade que, pese a contar con varios pases VIP para acceder a la zona restringida, no se les ha permitido la entrada para entregar sus reivindicaciones al alcalde y al president de la Generalitat, Carlos Mazón.

Sin embargo, el jefe servicio del equipo de bomberos presente en la mascletà ha intercedido por ellos y le ha arrancado el compromiso al alcalde de reunirse este sábado. La plataforma esperará a ver qué sale de ese encuentro. Si no se llega a un acuerdo, volverán a protestar en la mascletà de mañana y la del domingo, con la mirada puesta en la próxima Nit de la Cremà, cuya normal celebración quedaría en el aire al no participar cerca de un centenar de bomberos.

González recuerda que, pese a lo que ha venido asegurando el equipo de gobierno del PP estos días, no piden una mejora de las gratificaciones por trabajar en la cremà, sino la equiparación salarial con otras administraciones y mejoras tanto en las instalaciones como del material de trabajo.

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Y advierte de que, si más de dos tercios de los bomberos deciden no participar, la Nit de la Cremà se alargaría hasta el día siguiente ya que los equipos que trabajarán tendrán que apagar el doble o el triple de hogueras de lo que asumen cada año. "Si se suele acabar a las cinco de la mañana, si hay que apagar el doble de hogueras, imagina cuándo se acabará", señala González