Más contrataciones y falta de personal cualificado: así afronta el sector turístico la temporada en la Comunitat Valenciana

Valencia

La campaña turística arranca en la Comunitat Valenciana con los mismos problemas que en los últimos ejercicios: aumentan las contrataciones, pero persisten las carencias en algunos perfiles profesionales, según la patronal, y los sindicatos denuncian que se siguen cometiendo muchos abusos e incumplimientos de contrato.

Los últimos datos consolidados son del mes de mayo, que tuvo un 4'4% más de contrataciones en el sector que en el mismo mes de 2023. Ahora el sector tiene unos 220.000 trabajadores que pueden llegar en plena temporada 280.000.

Desde la patronal hotelera Hosbec se señala que las empresas turísticas sí han hecho mucho esfuerzo en los últimos tiempos para mejorar las condiciones laborales y salariales en un sector clave para la economía valenciana. Por ejemplo en los hoteles, explica que son muchos y muy diferentes los perfiles a cubrir: desde la limpieza y el mantenimiento hasta la gestión, pasando por la atención al público. La temporada es cada vez más larga y desestacionalizada, así que la estabilidad es mayor, pero las empresas también tienen que invertir en formación y en mejorar condiciones laborales para retener al personal. Y además, el diálogo social está funcionado, con incrementos salariales pactados hasta de dos dígitos para los próximos años, como defiende la secretaria general de Hosbec, Mayte García.

Y no solo es cuestión de salarios. También hay que hacer el sector turístico, en concreto la hostelería, más atractivo para los trabajadores, con mejoras en los turnos y en la capacidad de conciliación. Un auténtico encaje de bolillos como explica el presidente de Conhostur, Manuel Espinar.

Gonzalo Aranda, responsable del sector en UGT, apunta que ya se han incorporado muchos fijos discontinuos y se están haciendo contrataciones eventuales. Augura que pasará como todos los años: habrá denuncias por precariedad, por bajos salarios o por horas extra que realmente camuflan horarios de jornada completa. El convenio, recuerda Aranda, es un mínimo, no un máximo. Y si las empresas pagaran mejor, tendrían menos problemas para encontrar personal.

Desde UGT apuntan que no hay suficientes inspectores para controlar y detectar las irregularidades que se cometen y consideran que las grandes oleadas de inspección deberían concentrarse en verano, que es cuando más se vulneran los derechos de los trabajadores.