Armados con barras y palos: un vecino del edificio ocupado de la zona universitaria de Castellón denuncia a una inquilina ilegal por agresiones
Los inquilinos legales de las viviendas de alquiler asequible estudian denunciar a la Entitat Valenciana d'Habitatge i Sòl, dependiente de la Conselleria de Vivienda, por su "inacción" frente a las ocupaciones y al mal estado del edificio
Imágenes de la presunta agresión en un edificio de viviendas sociales ocupado de la zona universitaria.
Castellón
Los vecinos legítimos de un edificio de alquiler asequible ocupado desde hace años vuelven a denunciar lo "insostenible" de la situación que atraviesa el inmueble, esta vez en forma de un presunto delito de lesiones.
Según ha podido saber Radio Castellón, a última hora del pasado viernes se produjo un nuevo altercado en este conjunto de viviendas de alquiler social de la calle Joaquín García Girona, en plena zona universitaria de la capital de la Plana, gestionada por la Generalitat Valenciana, que terminó con uno de sus vecinos al corriente de pago en el Hospital General de Castellón.
Una de las presuntas agresoras es menor
Según relatan los vecinos legales en declaraciones a esta emisora, fue una de las ilegales, menor de edad, la que, armada con una barra de hierro, trató de agredir a una de las habitantes que en ese mismo momento se encontraba en su domicilio. Minutos después, otro vecino legal abandonó su vivienda en defensa de la anterior y una familiar de la menor, también armada con una barra de madera, agredió al hombre causándole graves lesiones en un brazo.
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En una entrevista concedida a Radio Castellón, la esposa del herido y vicepresidenta de la comunidad de vecinos, explica que con esta presunta agresión "se han rebasado todos los límites".
La vicepresidenta del edificio y mujer del herido, sobre las presuntas agresiones del pasado viernes.
La mujer del herido, que fue dado de alta ese mismo día, asegura haber interpuesto una denuncia ante la Policía Nacional por un delito de lesiones contra la presunta agresora. Se trata de un suceso que se produce apenas unas semanas más tarde de la marcha del edificio de una familia, con dos menores a su cargo, tras varios altercados, tensiones e intentos de acceder al domicilio por parte de varios inquilinos ilegales.
12 viviendas ocupadas y 10 blindadas y vacías
Cabe recordar que actualmente, según los mismos testimonios,12 viviendas se encuentran ocupadas de manera ilegal y 10 blindadas con sistemas especiales y vacías para evitar nuevas situaciones de este tipo. Por ello, como avanzó Radio Castellón, los vecinos legítimos del inmueble estudian interponer una denuncia contra la Entitat Valenciana d'Habitatge i Sòl, organismo dependiente de la Conselleria de Vivienda, por su "abandono" ante las "pésimas" condiciones del edificio y su "inacción" frente a las ocupaciones, denunciadas en múltiples ocasiones por los mismos habitantes.