Aparecen numerosos peces muertos en la desembocadura del río Serpis en Gandia

Gandia

La primera teniente de alcaldía y concejala de Medio Ambiente, Alícia Izquierdo, puso ayer en conocimiento de la Confederación Hidrográfica del Júcar la presencia de numerosos peces muertos en la desembocadura del río Serpis, en la partida del Marenys. Esta situación, a fecha de hoy, comentaba la concejala, «está generando un grave problema de salubridad pública que requiere una actuación inmediata. Los peces muertos están provocando malos olores y pueden ser un foco de contaminación y proliferación de bacterias, lo cual supone un riesgo para la salud de los vecinos y visitantes de la zona. Además, la presencia de estos peces muertos puede afectar negativamente el ecosistema del río y la calidad de la agua».

Por lo tanto, la primera teniente de alcaldía solicitó la intervención urgente de la Confederación Hidrográfica del Júcar para retirar los peces muertos y garantizar que se tomen las medidas necesarias para evitar que se vuelva a producir una situación similar. «Consideramos que su rápida actuación es esencial para preservar la salud pública y el medio ambiente en esta zona», concluye el escrito enviado.

La responsable de Medio Ambiente ha querido lanzar un mensaje de tranquilidad a la ciudadanía porque es habitual que con las lluvias torrenciales se produzca estos fenómenos. Y es que la lluvia del agua llega al caudal del río y arrastra elementos que hace que los peces se queden sin oxígeno.

En este mismo sentido se ha pronunciado Dani Muñoz, director de Medio Natural de Gandia, quien explicaba que para evitar este fenómeno se están construyendo en Gandia depósitos de agua pluviales.