"La sobreprotección a los niños puede ser también una forma de maltrato"

València

¿Están los padres criando la generación blandita? Niños sobreprotegidos, consentidos, mimados, niños débiles que cuando crezcan lo serán todavía más.

Poco se habla de la mal llamada "generación blandita", pero para el presidente del Colegio de Pedagogos y Psicopedagogos de la Comunitat Valenciana, Enrique Castillejo, "está siendo un problema real desde 2007, antes incluso de la pandemia". Ya en esa fecha, empezaron a alertar a la comunidad educativa de este síndrome, "padres que hacen las manualidades en casa para que sus hijos no fracasen en la escuela, que se enfrentan a los niños que no invitan a sus hijos a los cumpleaños, en suma, progenitores que impiden que sus hijos aprendan a caerse y levantarse después".

Cuando le planteamos en A Vivir Comunitat Valenciana a Enrique Castillejo si hay niños pequeños que literalmente, cuando caen al suelo, no saben levantarse solos, nos explica que esto es así, tal cual: " esperan la mano del adulto que está a su lado para hacerlo, se niegan a levantarse". Y explica que esto es " un grave problema porque estos niños en la edad adulta ya arrastran una personalidad que les hará ser incapaces de afrontar las dificultades del día a día". Por ejemplo, explica, " mantener un horario laboral, cumplir con sus obligaciones en cuanto tengan un problema, socializar con normalidad".

Castillejo explica que llevamos muchos años así y además es normal porque "si nos ofrecen ayuda permanentemente ante cualquier situación problemática, por menor que sea, buscaremos la ayuda cada vez que tengamos una situación difícil y el problema es que cuando vaya pasando el tiempo, los problemas, por muy mínimos que sean, se dramatizan.

Proteger en exceso puede ser una forma de maltrato

El presidente del Colegio de Pedagogos de la Comunitat Valenciana argumenta que la verdadera educación en los padres es saber que no se puede ser amigos de los hijos, se puede ser un padre amistoso, pero el padre y la madre son aquellas personas con la capacidad y la obligación, legal incluso, de formar a los hijos, cuidarlos, protegerlos, pero en esa protección, "que sean capaces de experimentar con el fracaso, con el éxito, con los buenos días y los malos días. proteger excesivamente y puede sonar muy duro, significa un maltrato a la larga".

Los padres también tienen un problema

Castillejo explica que cuando los pedagogos que están en las escuelas, hablan con estos progenitores para explicar el problema " se niegan a verlo" y llegan hasta el límite de recibir 30 o 40 quejas en los colegios profesionales porque consideran "que están teniendo un diagnóstico erróneo sobre sus hijos".

Y esto lo vemos continuamente en el día a día, en los restaurantes con los móviles para que no molesten. Es más fácil dar un móvil o tablet que perder tiempo en explicar "qué es lo que están haciendo mal". Y no es, añade, "porque los padres no quieren que sus hijos no tengan lo que les faltó a ellos, esa es otra generación, estos padres que están educando ahora, son jóvenes".

Un asunto que debería estar ya planteándose en el debate del día a día de la Educación, según Castillejo, porque esto " va a más".

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