Àlex Roca: "Los que me decían "no puedes" ahí están, viendo cómo doy visibilidad a la discapacidad"
Àlex Roca y su mujer Mari Carme Maza nos visitan en Forajidos para recordarnos que "todos podemos cumplir nuestros sueños"
Àlex Roca, un forajido imparable
Alicante
Razón o pasión. Son las dos grandes fuerzas interiores que mueven a los seres humanos. Tendemos a creer que debemos emplear más nuestro lado racional y que como contrapartida, hay que refrenar nuestra parte más pasional o emotiva. Pero también ocurre que podemos llegar a entender que ambas son complementarias, que la razón y la pasión lejos de ser rivales, se retroalimentan. Y no solo se llegan a sumar, también se pueden multiplicar.
Este es, quizás, el punto de vista de partida para comprender lo que hace 8 años movió a un chico que nació en Barcelona, que en la actualidad tiene 33 años, que tiene una discapacidad física del 76% y que tenía un cómodo empleo de contable, para dejarlo todo y empezar a "hacer locuras" por el mundo. Por otra parte, benditas locuras como participar en 2017 en el Orbea Monegros, o completar la Titan Desert o hacer triatlones, aquatlones, medias maratones... y hasta dos maratones: la de Barcelona y más recientemente la de los Juegos Olímpicos de París.
Como nos recuerda Àlex, que el pasado martes estuvo en Alicante junto con su mujer Mari Carme Maza (ambos demuestran ser un tándem bien conjuntado) para participar en una de las conferencias circulares de la Cámara Business Club, pese a la parálisis cerebral desde pequeño siempre le gustó fijarse objetivos. En este caso, la genética y esa conexión especial (o sentimental) que se establece entre abuelos y nietos también ha tenido mucho que ver en el camino emprendido por Alex. Fue su abuelo, fallecido hace dos años, quien desde el cariño le enseñó que en la vida había luchar y había que marcarse retos.
Ahora, Àlex y Mari Carme, van dando vueltas por el mundo con cinco maletas, ofreciendo charlas, grabando videos que cuelgan en su web y en sus redes y superando nuevos retos, no solo deportivos.
Además, también tiene tiempo para escribir algún libro o para participar en algún desfile de moda. Y es que si "el límite te lo pones tú", ¿por qué conformarse con aparecer en la portada del Runner's World tras ser la primera persona del mundo con su grado de discapacidad que ha completado una maratón? El mundo está lleno de posibilidades, de oportunidades y de retos que se pueden alcanzar.
Ese es el mensaje que Àlex pretende lanzar: no quiere que todo el mundo se ponga a correr o a montar en bicicleta, quiere decirnos que si nos apetece salir de nuestra zona de confort, ahí fuera hay un mundo repleto de oportunidades en el que nuestros sueños se pueden hacer realidad.
Y por otra parte, también les recuerda a los menos convencidos, a los más conservadores o más racionales o más cautos o más protectores (táchese la alternativa que corresponda en cada caso) que los limites se los marca cada uno. Y que esos que dicen "tú no puedes" no siempre aciertan. Además, de esta forma, añade, también ayuda a visibilizar la discapacidad.