Los agricultores alicantinos reclaman habilitar pozos de sequía, riegos de socorro y más ayudas para evitar el abandono de los cultivos

Alicante

Los agricultores de la provincia de Alicante afrontan este nuevo año hidrológico, que arranca el próximo martes 1 de octubre, con "pesimismo" e "incertidumbre" ante la ausencia de lluvias y la previsión de un otoño "seco".

Desde ASAJA Alicante y la Unió de Llauradors reclaman tanto al Gobierno Central como a la Generalitat Valenciana diferentes medidas que ayuden a paliar la sequía, que permitan sacar adelante los cultivos de invierno y evitar el abandono de las plantaciones, sobre todo en zonas del interior de la provincia.

José Vicente Andreu, presidente de ASAJA Alicante, explica que en el regadío tradicional de la Vega Baja van a comenzar el año hidrológico con una restricción de entre el 40 y el 57% y con los embalses del Segura "completamente vacíos". En el resto de la provincia, asegura, los cultivos de secano se encuentran en una situación "límite", donde no se ha cosechado prácticamente nada en ningún cultivo".

Por otro lado, confirma que la campaña de hortalizas que se inició a finales de agosto se está desarrollando "bien" pero con la amenaza de que en las próximas semanas "no tengan agua para poder regarse y llegar a buen término". La Uva Embolsada del Vinalopó, en cambio, ha tenido buena campaña y con la granada mollar de Elche están pendientes de ver cómo afecta una plaga que ha producido un daño estético al producto.

Ante esta situación, Andreu reclama al Gobierno Central que acabe "con la burocracia" y decrete de forma inmediata la puesta en marcha de pozos de sequía, pero también, que establezca "riegos de socorro" para salvar las plantaciones de este invierno. "Si no hay una reacción rapida por parte del Gobierno, de poner los pozos de sequía en marcha, que debían de haber estado puestos desde hace muchos meses, o que hagan un riego de socorro donde haya agua, la situación en los cultivos de invierno, va a ser muy complicada" destaca.

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Por su parte, Carles Peris, secretario general de la Unió de Llauradors, asegura que las pérdidas económicas por la falta de lluvias ascienden a unos 30 millones de euros en la provincia de Alicante y muestra su preocupación al entrar en un nuevo año hidrológico "sin garantías".

Recuerda que las reservas hídricas se encuentran al 19% en la provincia y que ahora mismo el trasvase, la reutilización de agua depurada o la desalación están salvando a los agricultores. Eso sí, señala que tanto el agua depurada como la desalación tiene algunos inconvenientes como el inasumible precio para algunos cultivos o la calidad para el riego.

Peris pide a la Generalitat Valenciana que habilite más líneas de ayuda para el sector, sobre todo en las zonas de secano e interior, porque la previsión es que haya "más abandono y despoblación" y al Gobierno Central que no recorte más las cantidades del trasvase Tajo-Segura.

También reclama al resto de sectores económicos de la provincia que hagan "una reflexión" para que se vayan reduciendo los consumos de agua.

Mazón defenderá en Bruselas la agricultora de la Comunitat

El president de la Generalitat, Carlos Mazón, defenderá en la Unión Europea este próximo martes "los intereses y la importancia de la agricultura de la Comunitat Valenciana.

Durante la presentación del Dictamen sobre Competitividad Agrícola ante el Comité de las Regiones, Mazón defenderá las cláusulas espejo y el principio de reciprocidad para que la agricultura valenciana pueda competir en las mismas condiciones que otros países.

El jefe del Consell solicitará a la Unión Europea "que no dé la espalda a la agricultura valenciana" y la adopción de medidas urgentes para que "continúe siendo un sector estratégico, viable y con futuro".

Asimismo, ahondará en los retos de la agricultura como la sequía, la competencia desleal y el exceso de burocracia y tratará de impulsar una estrategia integral que refuerce la competitividad del sector agrícola europeo.