La presa de Forata quedó a distancia de la coronación el día de la DANA

València

La de Forata fue la presa que acaparó las miradas y las preocupaciones durante la fatídica jornada del pasado 29 de octubre, cuando la provincia de Valencia registró precipitaciones históricas. El temor ante una posible rotura de la infraestructura sobrevoló aquel martes e inundó las redes sociales con bulos en los días inmediatamente posteriores, generando una sensación de alarma todavía mayor entre la población.

Sin embargo, "la cantidad de agua recogida por la presa se quedó a distancia de verterse por coronación, por lo que no hubo riesgo físico sobre el comportamiento del embalse". Así lo ha confirmado en Hoy por Hoy Valencia Ignacio Escuder, catedrático de Ingeniería Hidráulica en la Universitat Politècnica de València y expresidente del Comité Español de Grandes Presas.

"Nuestro principal problema es la sequía, no las inundaciones. De hecho, es habitual que activemos el escenario 0 de emergencia cuando se producen vertidos pequeños. La DANA fue un evento muy extraordinario y excepcional, pero la presa siempre cumplió la función para la que está preparada, que es almacenar los litros de lluvia", ha explicado.

"Sin presa, el resultado hubiese sido que todos esos litros que se descargaron en las cabeceras de los ríos y ramblas hubieran llegado mucho antes a las zonas damnificadas. Ese es su papel, protegernos de grandes crecidas. Es más, si no las tuviéramos, solamente podríamos utilizar el ocho por ciento del agua que llueve en España".

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