Los juzgados afectados por la DANA tardarán varios meses en recuperar la normalidad

València

La sede judicial de Catarroja, la más afectada por la DANA, tardará más de cuatro meses en reabrir en su ubicación original. La Conselleria de Justicia tiene previsto invertir más de dos millones de euros en rehabilitar el edificio, con el bajo y el sótano completamente arrasado por las inundaciones, y mientras tanto la atención se seguirá prestando en la Ciudad de la Justicia de València. Entre lo dañado se encuentran muchos archivos judiciales, que ya han sido trasladados al Instituto Valenciano de Conservación para tratar de restaurarlos, aunque muchos de ellos estaban ya digitalizados.

José Ignacio Casar, el subdirector general de Justicia, afirma que tras la riada se han visto afectados, además de la sede judicial Catarroja, varios juzgados de paz, cuyas instalaciones dependen de los ayuntamientos pero con personal a cargo de la Conselleria. Cuatro de estos cinco juzgados ya han conseguido reabrir, algunos con instalaciones profesionales, pero la sede de Catarroja tardará varios meses, ya que estaba muy cerca del barranco que desbordó y el bajo y el sótano han quedado completamente inservibles.

Aunque la estimación inicial era poder reabrir en cuatro meses, el proceso de secado de paredes para garantizar la salubridad hará que la reapertura no se produzca hasta abril, como mínimo. Mientras tanto, los cinco juzgados de primera instancia e instrucción y el de guardia que hay en Catarroja dan servicio en la Ciudad de la Justicia de València.

Casar destaca el trabajo de los técnicos de la Conselleria que permitieron reabrir las sedes, aunque fuera en espacios provisionales, en pocas semanas y admite que estas inundaciones cuestionan la conveniencia de colocar los archivos judiciales o las dependencias importantes en los sótanos o las plantas bajas. El PATRICOVA, el plan de prevención de inundaciones de la Generalitat, establece nuevas normas para prevenir que ocurra algo similar que ya se están aplicando en los nuevos juzgados de Gandia o de Llíria, aunque cuesta más dinero.

De esta forma, estos dos nuevos juzgados y todos los que se construyan a partir de ahora, no tendrán dependencias judiciales en los sótanos y la planta baja se elevará 80 centímetros. En todo caso, el subdirector general de Justicia insiste en que esta DANA superó todas las previsiones.

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