El río Canyoles, bastión de la tortuga ibérica frente a la amenaza invasora
El tramo de Xàtiva se sitúa entre los más ricos de la Comunitat en ejemplares autóctonos, según los últimos datos del Proyecto Emys
Tortuga de río / Simon McGill
La Costera
El río Canyoles, a su paso por Xàtiva, se consolida como uno de los puntos más relevantes de la Comunitat Valenciana para la conservación de la tortuga de agua ibérica (Mauremys leprosa), una de las especies autóctonas amenazadas por la proliferación de tortugas exóticas invasoras en los ecosistemas acuáticos valencianos.
Según ha informado Acció Ecologista-Agró, organizadora del Proyecto Emys, en la edición de 2024 se censaron 20 ejemplares de Mauremys leprosa en el tramo del Canyoles, situándolo entre los tres espacios con mayor número de tortugas de esta especie detectadas, junto con el río Magre y el Pont Sec, ambos también con 20 individuos registrados.
En total, durante la pasada edición —la decimocuarta del proyecto, celebrada entre abril y octubre— se censaron 156 tortugas autóctonas: 47 galápagos europeos (Emys orbicularis) y 109 tortugas de agua ibéricas. El Canyoles se destacó especialmente por la abundancia de esta última especie, considerada vital para el equilibrio de los ecosistemas fluviales.
Invasoras, el gran reto
A pesar del buen dato para el río Canyoles, el balance global del Proyecto Emys vuelve a dejar una lectura agridulce: las especies invasoras siguen siendo mayoría. En 2024 se retiraron 225 tortugas exóticas del medio natural, la mayoría tortugas de orejas rojas o amarillas (Trachemys scripta), que compiten directamente con las autóctonas por alimento y espacio. Aunque esta cifra ha descendido respecto a años anteriores —577 retiradas en 2022 y 281 en 2023—, sigue siendo elevada.
Un esfuerzo colectivo
La edición de 2024 del Proyecto Emys, considerado el mayor voluntariado ambiental de la Comunitat Valenciana, ha contado con la participación de 516 personas y se ha desarrollado en 14 zonas húmedas y ríos, entre ellos el Canyoles, el Magre, el Vinalopó, el Júcar o el barranco de Barxeta. Las tareas incluyeron censos, seguimiento, retirada de especies invasoras, talleres escolares y formación de nuevos equipos de voluntariado.
Gracias a la colaboración de entidades como la Conselleria de Agricultura, Ganadería y Pesca, se han liberado tortugas con chip en zonas clave para reforzar las poblaciones, y se ha reubicado ejemplares desplazados por fenómenos extremos como la dana.
Próximas citas
Para 2025, el Proyecto Emys ya ha anunciado convocatorias de voluntariado, como la que tendrá lugar entre el 11 y el 17 de mayo en el marjal de Rafalell i Vistabella. La organización hace un llamamiento a seguir sumando manos para proteger una biodiversidad cada vez más frágil, donde ríos como el Canyoles siguen demostrando que aún hay esperanza para la fauna autóctona si se trabaja en red.
