Los regantes del Tajo-Segura de Alicante: "Que la sentencia del Supremo da por muerto el trasvase no es cierto"

Alicante

Los regantes alicantinos y del levante niegan que el Tribunal Supremo haya estimado la aplicación con carácter inmediato de los caudales ecológicos en el Tajo. Y advierten de que "sin el trasvase no se puede vivir y vamos a morir en la calle para defender nuestra tierra".

Tras la sentencia conocida este miércoles, los agricultores de la provincia de Alicante y del Levante han defendido que la situación no cambia y que el tribunal avala rebajar el caudal ecológico del Tajo gradualmente, en contra de lo que interpreta el Gobierno de Castilla-La Mancha, por lo que no habrá "apagón inmediato del acueducto".

SCRATS

Lucas Jiménez, presidente del Sindicato Central de Usuarios del Acueducto Tajo-Segura (SCRATS), en un acto en Lorca ha recordado que la sentencia es “farragosa”, pero “tras leerla, releerla y analizarla” durante las últimas horas puede afirmar que “nada de lo que dice" el jefe del Ejecutivo castellano-manchego, Emiliano García-Page, sobre ella es cierto.

Ha añadido que los regantes están “expectantes” hasta conocer la opinión del Ministerio de Transición Ecológica, “pero la sentencia da un rejonazo a la planificación del Tajo” porque “no ha preservado recursos naturales en el curso medio” del río.

"Una ley frente a un decreto"

Radio Alicante ha hablado con Ángel Urbina, presidente de la Junta Central de Usuarios del Vinalopó y L´Alacantí, y miembro de SCRATS que, en la misma línea ha asegurado que "no hay argumentos técnicos y decir que la sentencia da por muerto el trasvase no es cierto".

Ha explicado que siguen defendiendo que los regantes no pueden aumentar los 6 metros cúbicos por segundo y que así lo dice una ley, "frente a un decreto". Al respecto ha recordado que aún no se ha pronunciado el Supremo tras los recursos presentados por los regantes y por el gobierno murciano.

"No supone ninguna modificación de lo que antes de la sentencia teníamos", ha resaltado, y ha añadido que "el problema es que hay un decreto de la demarcación del Tajo que dice que el caudal ecológico tiene que incrementarse, pero nosotros hemos alegado que hay una ley que mantiene que no se cambie y nunca un decreto ha sido superior a una ley" Y ha añadido: "Algún tribunal nos dará la razon, si no es aquí, en Bruselas o donde sea".

Llamamiento a la ciudadanía

Asimismo, Urbina ha realizado un llamamiento a la ciudadanía para la defensa del trasvase Tajo-Segura en la calle. "Ya está bien de medias tintas", ha señalado y "vamos a morir en la calle para defender nuestra tierra y aquellos que no estén de acuerdo con defender el Tajo-Segura para el Levante español, son traidores a la tierra", ha llegado a decir.

Preocupación

Se suman más voces a la reivindicación del Tajo-Segura. El presidente de la Unión Empresarial de la provincia de Alicante (UEPAL), Cesar Quintanilla, en Hoy por Hoy Alicante ha señalado que hay preocupación por lo que entienden que puede ser "el mayor golpe económico que se puede dar a la provincia"

"No somos conscientes de lo importante que es contar con agua, ya que no solo es un problema para los agricultores, sino también para el abastecimiento residencial, para el turismo o la industria", ha resaltado.

La Diputación achaca la sentencia a la política hídrica del Gobierno

El presidente de la Diputación de Alicante, Toni Pérez, ha atribuido la sentencia del Tribunal Supremo que determina que los caudales ecológicos del río Tajo deben alcanzarse de forma inmediata y no de manera escalonada hasta 2027 a la "nefasta, arbitraria y partidista política hídrica del Gobierno central”.

“Esta decisión, que se suma al anuncio de las nuevas reglas de explotación del trasvase Tajo-Segura, supone un nuevo mazazo para esta infraestructura y pone en serio riesgo su viabilidad”, ha apuntado Pérez, a traves de un comunicado de la corporación provincial.

Ha acusado al Gobierno de España de promover una política del agua, en su opinión, “muy alejada del interés general y del principio de solidaridad y carente del rigor científico y técnico que requieren este tipo de decisiones, que, además, deben ser fruto del consenso” y ha alertado de las consecuencias que el aumento del caudal ecológico tendrá sobre el levante español, “produciendo perdidas económicas millonarias y la destrucción de miles de empleos en todos los sectores, además de contribuir a la destrucción de suelos y al avance de la desertificación”.