El Valencia Basket se debate entre pagar 6 millones a la Euroliga o apostar por la FIBA-NBA

Valencia

El Valencia Basket sigue debatiéndose sobre la competición europea que disputará la próxima temporada, que será la del estreno del Roig Arena. El club taronja afronta como una decisión estratégica para varios años aceptar la vía que le ofrece la Euroliga o la BCL, que llega de la mano de la FIBA y a la que se espera que se sume en dos años la todopoderosa NBA.

Las dos opciones están sobre la mesa de Hermanos Maristas. La Euroliga es la competición siempre anhelada por el Valencia Basket, aunque los últimos movimientos de la organización de la competición tienen molesto al club taronja. El pasado 10 de abril, el Valencia Basket conoció las condiciones para garantizarse una plaza en la competición durante los próximos tres años.

El hecho de que Euroliga pida seis millones de euros (dos por año) y deje fuera del reparto de beneficios al Valencia Basket molesta. Pero, además, tampoco gusta que desde Euroliga se comprometiesen a dar un OK definitivo a mediados de mayo tras una reunión de los 13 equipos propietarios de la competición (entre ellos los españoles Real Madrid, Barcelona y Baskonia) y esta comunicación todavía no se ha producido.

En el otro lado de la mesa, o de la balanza, está la propuesta de FIBA para disputar la BCL, una competición que ahora tiene menos peso que la Euroliga pero que se espera que, a partir de la 27-28 con el previsto desembarco de la NBA, gane peso e incluso se lleve a clubes clásicos de Euroliga, como ya ha ocurrido con el ALBA de Berlín.

El escenario ideal para el Valencia Basket, que espera plantear a Euroliga, es disputar dos años este torneo y dejarse abierta la puerta para después, si conviene, dar el salto a la BCL, porque en el Valencia Basket algo que frena también de la propuesta de Euroliga es la incerteza de qué ocurrirá a partir de esos tres años que se garantizaría ahora pagando los seis millones. La incerteza de no saber si habrá que volver a negociar o si se produce un nuevo 'volantazo' de los propietarios que deje al Valencia Basket otra vez en el aire o incluso fuera.

En cambio, sí ofrece una mayor seguridad o un panorama más cierto la BCL, máxime si se produce la llegada de la NBA. La duda que puede ofrecer esta vía es cómo se pueda quedar la afición taronja, que daba por hecho que el traslado al Roig Arena vendría acompañado de la Euroliga, la competición hoy en día más atractiva del baloncesto europeo. Si se acaba optando por la vía BCL, no está descartado incluso que se vuelvan a revisar los precios de los abonos o alguna medida que beneficie a quienes tengan su pase.