Investigadoras de la UMH prueban una terapia contra la anorexia nerviosa por videollamada
El estudio evalúa una terapia breve, accesible y centrada en las familias, que combina el trabajo directo con pacientes y el entrenamiento de sus familiares como cuidadores clave

Imagen de la Universidad Miguel Hernández / Javier Muñoz

Investigadoras de la Universidad Miguel Hernández de Elche están desarrollando un estudio pionero para evaluar la eficacia de un tratamiento psicológico dirigido a pacientes con anorexia nerviosa, realizado íntegramente por videollamadas. El enfoque terapéutico, que pone el foco en el papel activo de las familias, podría convertirse en una alternativa accesible y eficaz para mejorar el abordaje de este trastorno alimentario.
La anorexia nerviosa afecta a una de cada cien mujeres en España y se caracteriza por una restricción extrema en la ingesta de alimentos. Su alta tasa de recaídas, reingresos y cronicidad ha llevado al equipo de investigación de la UMH a analizar nuevas estrategias para mejorar la adherencia al tratamiento y la recuperación de quienes la padecen.
La profesora Yolanda Quiles, directora del Grupo de Investigación e Intervención en Trastornos de la Conducta Alimentaria de la UMH, explicó que el proyecto se basa en la adaptación de programas terapéuticos ya validados, pero trasladados a un formato digital. En concreto, el modelo que se está implementando es ‘Echomantra’, una intervención desarrollada por la psiquiatra británica Janet Treasure, que combina el trabajo directo con los pacientes y el entrenamiento de sus familiares como cuidadores clave.
Según Álvaro Ruiz, investigador del área de Ciencias del Comportamiento y Salud de la UMH, esta terapia se está traduciendo y adaptando al contexto español, ya que todos sus materiales originales están en inglés. Para evaluar su eficacia, el equipo prepara un ensayo clínico con 148 mujeres adultas reclutadas en siete unidades especializadas, que recibirán el tratamiento habitual con o sin el apoyo del protocolo ‘Echomantra’.
El estudio incluirá ocho sesiones online de terapia psicológica, junto con cuadernos de trabajo y materiales audiovisuales para pacientes y cuidadores. Las evaluaciones se realizarán al inicio del tratamiento y después de dos, seis y doce meses.
La universidad ya aplicó con éxito esta intervención en 2023 a una adolescente de 15 años y su madre, con resultados muy positivos. Según los investigadores, la paciente logró mejorar su estado emocional, aumentar de peso y reducir sus síntomas, mientras que su madre desarrolló más competencias para apoyarla en el proceso.




