Comienzan las obras para instalar baños públicos, marquesinas y cabinas de vigilancia en el Rastro de València

València

Este verano terminarán parte de las obras de construcción de edificios auxiliares en el Mercado del Rastro de València, que mejorarán las condiciones de venta y de acceso al entorno y permitirán disponer de aseos públicos, cabinas para el personal de vigilancia y marquesinas para la venta. Los trabajos ya han empezado y contemplan una inversión de 260.000 euros por parte del Ayuntamiento. Se espera que buena parte de ellos terminen antes de septiembre.

Lo confirma en declaraciones a Radio Valencia el concejal de Mercados, Santiago Ballester, que explica que ahora mismo el rastro de València tiene 249 puestos que cada domingo venden productos de todo tipo en uno de los mercados más famosos de la ciudad. El objetivo es que tanto vendedores como clientes tengan unas instalaciones cómodas y accesibles.

Se están construyendo dos edificios para albergar el personal de vigilancia y unos aseos públicos. También se colocarán unas marquesinas de protección y se mejorará la iluminación.

El proyecto se sitúa en el interior de la plaza de Amelia Chiner, entre la avenida de Tarongers, y las calles de Luis Peixó y de Yáñez de la Almedina. Tal como contempla el proyecto, se habilitarán dos edificaciones en las subparcelas situadas próximas al acceso a la plaza por la calle Yáñez de la Almedina. Cada una de ellas alberga una oficina para el personal de vigilancia con su aseo, y se está adecuando otro local destinado a aseos públicos.

Asimismo, se colocarán unas marquesinas de protección con iluminación en los accesos señalizados por la calle Yáñez de la Almedina, por la calle Luis Peixó, y por la avenida de los Naranjos.

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En la actualidad hay 249 puestos en el rastro y “el objetivo es que los vecinos que acuden los domingos al rastro a comprar tengan unas instalaciones cómodas y accesibles así como las personas que desarrollan su actividad profesional comercial dispongan de las condiciones necesarias de salubridad, comodidad e higiene, así como que se garantice la seguridad de vendedores y clientela”, ha remarcado Ballester.

Aseos en contenedores reutilizados

Se habilitarán aseos separados para personas con movilidad reducida, para hombres, mujeres e infancia. Así como un espacio para el personal de seguridad. Para ello, se usarán elementos industrializados (contenedores marítimos tipo High Cube) que permiten su reutilización para usos distintos, lo que incrementa su vida útil y reduce el impacto ambiental.

Se llevará a cabo el pertinente aislamiento térmico por el interior, y se mantendrá la envolvente original por el exterior, debidamente adecuada. Los módulos se situarán en las subparcelas en las que actualmente hay plantación de césped y cuatro árboles, que no se verán alterados por la ubicación de los dos módulos.

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En cuanto a las actuaciones en los accesos, se distinguen dos diferentes: En el acceso 1 se dispondrá un espacio delimitado por celosía abierta y cubierto con una pérgola de las mismas características para protección, y un banco para uso del personal de control en accesos de vehículos. Por su parte, en los accesos 2 y 3 ya existe una estructura realizada con perfiles galvanizados y unas cubiertas formadas por bastidores del mismo material con lamas inclinadas, por lo que se procederá a pintar estos elementos existentes y se colocarán lamas por la parte inferior para mayor protección solar.

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