El silencio de la sirena de las 6 de la mañana despierta el conflicto en La Pobla del Duc

La Pobla del Duc (La Vall d'Albaida)

Una semana después de que el Partido Popular de La Pobla del Duc denunciara públicamente la retirada de la tradicional sirena de las 6 de la mañana, la polémica no solo continúa, sino que se ha convertido en un auténtico fenómeno viral. El portavoz popular, Òscar Bataller, ha reforzado su crítica en una entrevista radiofónica, donde ha calificado la decisión como “un ataque a la cultura y a la identidad del pueblo”, y ha denunciado que “el gobierno ha actuado de espaldas a la ciudadanía”.

“El sonido de la sirena no es un simple pitido. Es memoria, es historia, es identidad. Es un símbolo que nos une a todos, más allá de ideologías”, ha defendido Bataller, quien considera que el equipo de gobierno, encabezado por el socialista Vicent Gomar, ha cometido “un grave error” al eliminarla sin consultar previamente a la población ni al resto de grupos políticos.

Una costumbre con más de 75 años de historia

El portavoz del PP ha explicado que la sirena comenzó como un mecanismo práctico para marcar los horarios laborales del campo, pero que con el tiempo se ha convertido en “una tradición profundamente arraigada y única en toda la comarca”. “La gente se ha criado con ese sonido. Muchos vecinos se iban a trabajar o volvían de fiesta escuchando la sirena de las seis. Forma parte de nuestra vida”, ha asegurado.

La indignación popular, según Bataller, venía creciendo desde días antes de la denuncia pública, cuando muchos vecinos empezaron a notar su ausencia. “Hicimos comprobaciones in situ y, efectivamente, la sirena ya no sonaba. Cuando lo confirmamos, lanzamos el vídeo, y la respuesta fue inmediata: más de 15.000 visualizaciones en Instagram y más de 6.000 en Facebook en apenas unos días”, ha afirmado.

Motivos legales y respuesta del Ayuntamiento

Desde el Ayuntamiento han justificado la retirada de la sirena basándose en la Ley 7/2002 de la Generalitat Valenciana sobre contaminación acústica, que restringe los ruidos entre las 22:00 y las 08:00 horas. El gobierno local ha recordado que esta norma fue aprobada por un ejecutivo del propio PP y que se han visto obligados a aplicarla ante una posible denuncia.

Sin embargo, Bataller considera esta explicación “insuficiente y oportunista”. “Esa ley lleva en vigor 23 años, y el gobierno local ha tenido tiempo de sobra para buscar fórmulas legales que compatibilicen la normativa con esta tradición. En lugar de buscar soluciones, se escudan y se victimizan”, ha lamentado.

Una recogida de firmas “apartidista” y en crecimiento

Ante la falta de respuestas, el PP ha impulsado una recogida de firmas —presencial y online— para exigir la restitución de la sirena y pedir su protección como Bien de Relevancia Local o Bien de Interés Cultural Inmaterial. En menos de 24 horas ya se han superado las 200 firmas, y la cifra sigue creciendo.

Bataller ha insistido en que se trata de una iniciativa “apartidista”, sin logotipos ni referencias políticas en los formularios. “Esto va más allá del PP. Es algo de todos. Es un elemento identitario que une a personas de izquierdas y derechas. Por eso pedimos a toda la ciudadanía que se sume”.

Críticas a la falta de diálogo y transparencia

Preguntado por qué no se intentó una mediación previa con el alcalde, Bataller ha reconocido que el PP decidió no contactar directamente con el equipo de gobierno por “la pérdida total de confianza”. “Presentamos escritos que no se contestan. No colaboran con los concejales. Lo que criticamos hoy no es una excepción: es una forma de gobernar basada en la falta de transparencia y en decisiones unilaterales”, ha afirmado.

Incluso desde Compromís, según el portavoz popular, habría malestar. “Hemos hablado con miembros del partido y, aunque puedan tener matices, coinciden en que las cosas no se están haciendo bien. No se informa, no se dialoga, no se consulta”.

"La sirena no se toca"

Bataller ha concluido su intervención reafirmando el compromiso del PP con esta causa: “No vamos a quedarnos de brazos cruzados. La sirena no se toca. Vamos a luchar para que vuelva a sonar cada mañana como siempre lo ha hecho, porque es parte de lo que somos como pueblo”.

El punto de vista del consistorio

El consistorio ha aclarado que el resto de sirenas —las de las 12:00, 15:00 y 18:00— siguen funcionando con total normalidad. También explican que evitaron hacer pública la decisión inicialmente para no poner en riesgo la continuidad del resto de señales sonoras, al temer posibles denuncias vecinales.

En el comunicado, el gobierno local lamenta el clima de crispación generado y denuncia que algunos vecinos han sido objeto de insultos y señalamientos. Además, reprocha al portavoz del PP no haberse informado previamente sobre los motivos reales de la retirada antes de hacer pública su denuncia. “Una actuación responsable habría sido informarse antes de lanzar un discurso que altera la convivencia en el pueblo”, afirman.

Desde el Ayuntamiento también subrayan que la sirena no está catalogada como bien patrimonial inmaterial, aunque reconocen su valor simbólico. Y apuntan a otros problemas que consideran más graves y urgentes en el municipio, como la falta de atención médica, los impagos a farmacias o la reducción del servicio de bomberos.

“Estamos en total desacuerdo con los insultos que se están produciendo. Por el bien de la convivencia y de la imagen del pueblo, pedimos que estas actitudes cesen”, concluye el comunicado oficial.